El doctor Linfa Wang, quien dirige el Programa de Enfermedades Infecciosas Emergentes de la Facultad de Medicina de Duke-NUS en Singapur, trabaja en el desarrollo de un nuevo ensayo para detectar anticuerpos contra el SARS-CoV-2 en muestras de sangre, que es una indicación de infección previa, según da a conocer la prestigiosa revista Science. Esta herramienta podría ayudar a desenredar cómo comenzó la pandemia hasta llegar a su origen. Hasta ahora, la evidencia es que el virus se originó en los murciélagos, animales que Wang ha argumentado durante mucho tiempo que son especialmente adecuados para albergar virus que representan un peligro para los humanos. Ahora, espera que su ensayo pueda ayudar a rastrear el camino del nuevo coronavirus hasta los humanos y determinar cuándo y dónde se desbordó por primera vez.
MURCIÉLAGOS
En 1994, cuando apareció un nuevo virus que mató a 14 caballos y a un entrenador, Wang logró secuenciar el virus, más tarde llamado virus Hendra, y ayudó a desarrollar una vacuna para caballos. El virus resultó ser transmitido por murciélagos. Unos años más tarde, Wang trabajó en otro virus nuevo, el virus Nipah, también de murciélagos. Luego vino el síndrome respiratorio agudo severo (SARS). Intrigado, el experto revisó la literatura y encontró muchos otros virus relacionados con los murciélagos.