Washington, Estados Unidos. AFP.
Expertos en salud pública determinaron que las mascarillas faciales son una herramienta clave para reducir la propagación del nuevo coronavirus, pero no todos los tapabocas son igualmente efectivos y algunos pueden ser incluso contraproducentes. Un nuevo estudio clasificó 14 tipos de mascarillas comúnmente disponibles, y encontró que los barbijos médicos ofrecen una protección significativamente mayor contra la propagación de las gotitas que pueden trasmitir el virus que los tapabocas de algodón, mientras que los pañuelos de cuello no sirven de casi nada. Los hallazgos publicados en la revista estadounidense Science Advances tienen implicaciones de política pública, en particular en países como Estados Unidos, donde las autoridades alentaron a la población a usar mascarillas de tela y dejar las de tipo médico a los trabajadores de la salud porque escasean.
Las mascarillas faciales son importantes porque entre el 30% y el 40% de las personas infectadas pueden no mostrar síntomas, pero aun así transmiten el virus sin saberlo al toser, estornudar o simplemente hablar. Para este estudio difundido el 7 de agosto, investigadores de la Universidad de Duke en Estados Unidos hicieron que varios participantes enmascarados hablaran en una habitación oscura en dirección a un rayo láser, mientras se filmaba la escena (la gente repitió: “Manténganse saludable, gente” y “Cuídense”).
El número de gotitas que atravesaban el rayo fue analizado por computadora. Como era de esperar, las mascarillas N95 reservadas para el personal hospitalario (el estándar estadounidense equivalente a FFP2 europeo) son las más efectivas, reduciendo la transmisión de gotitas en más del 99,9%, en comparación con el no uso de un tapabocas.