Londres, Reino Unido. AFP.
El primer ministro británico Boris Johnson, que lleva un día en cuidados intensivos tras empeorar su salud debido al nuevo coronavirus, no tiene neumonía y respira sin ayuda, aseguró ayer su gobierno, esforzándose por calmar la preocupación.
Por la tarde, continuaba “recibiendo tratamiento estándar de oxígeno y respirando sin ninguna otra ayuda”, afirmó el ministro de Relaciones Exteriores, Dominic Raab, quien lo reemplaza a la cabeza del ejecutivo. “No ha necesitado respirador mecánico ni apoyo respiratorio no invasivo”, aseguró en rueda de prensa. No se le diagnosticó neumonía, había dicho previamente su portavoz.
“Si algo sé sobre este primer ministro es que es un luchador” y “volverá a guiarnos a través de esta crisis en poco tiempo”, subrayó Raab. Único líder de una gran potencia enfermo de COVID-19, Johnson, de 55 años, fue ingresado al Hospital St Thomas de Londres el domingo.
RÉCORD DIARIO
El Reino Unido se está convirtiendo en el nuevo punto candente en Europa. Ayer, el país superó los 6.000 muertos por coronavirus, con un récord diario de 786 fallecimientos, pero algunos británicos siguen sin respetar las consignas de distanciamiento social.
Sin embargo, en opinión de James Gill, profesor de la Warwick Medical School, con el ingreso del primer ministro para muchos “la epidemia de coronavirus se acaba de volver real”. “Para una parte no menospreciable de la población británica, la COVID-19” era una enfermedad “que afectaba a otra gente, pero Boris Johnson no es otra gente”, agregó.