El ejército de Corea del Sur afirmó el lunes que está “totalmente listo” para responder al Norte, que envió soldados a la frontera para prepararse para disparar, en medio de una escalada en su disputa por el vuelo de drones sobre Pyongyang. Corea del Norte acusa al Sur de sobrevolar drones en su capital para lanzar panfletos propagandísticos con “rumores incendiarios y basura”, y advirtió ayer domingo que, si detecta otro dron, lo consideraría como “una declaración de guerra”.
El ejército surcoreano había negado ser responsable de los vuelos, y algunos han especulado que se trata de grupos activistas que en el pasado han enviado propaganda y dólares estadounidenses al Norte utilizando globos. Pero Pyongyang insiste en que Seúl es culpable, y afirmó que ocho brigadas de artillería fueron movilizadas en la fronteriza Zona Desmilitarizada “para alistarse para abrir fuego”, y reforzó los puestos de observación aérea en la capital.
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“Nuestro ejército monitorea la situación de cerca y está plenamente preparado para las provocaciones del Norte”, declaró a periodistas Lee Seong-joon, portavoz del Estado Mayor Conjunto surcoreano. Pyongyang aseguró que los drones propagandísticos han infiltrado el espacio aéreo de la capital en tres ocasiones los últimos días, y la poderosa hermana del líder Kim Jong Un amenazó con un “desastre horrible” si no se detienen.
Kim Yo Jong, hermana del líder norcoreano, declaró el lunes en un comunicado que la incursión de drones es “un desafío imperdonable y malicioso a nuestro Estado”. El Estado Mayor Conjunto surcoreano no confirmó ni negó la responsabilidad del ejército en el envío de drones al Norte, aunque calificó la denuncia de Pyongyang como “desvergonzada”.
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Cierre “permanente” de la frontera
El ejército de Corea del Norte anunció este miércoles que va a “cerrar y bloquear permanentemente la frontera” con Seúl y dijo que informó a Estados Unidos para evitar cualquier incidente. Pyongyang indicó en un comunicado que procederá a “cortar las carreteras y las vías férreas” que eventualmente podrían haber servido para facilitar los viajes entre las dos Coreas.
Esta medida es sobre todo simbólica, ya que el límite entre las dos Coreas es una de las fronteras más militarizadas del mundo y desde hace años no hay viajes ni intercambios. El ejército norcoreano afirmó que la decisión es una “medida de autodefensa” en respuesta a los “ejercicios de guerra” de Corea del Sur y al desplazamiento de medios nucleares estratégicos de Estados Unidos.
Las relaciones entre Pyongyang y Seúl pasan por uno de sus peores momentos en años y el gobierno del Norte cerró las agencias dedicadas a una eventual reunificación. Este anuncio se produce en un momento de tensión en el que se esperaba que Corea del Norte suspendiera el martes un histórico acuerdo con Seúl de 1991, como parte de un plan del líder Kim Jong Un para definir oficialmente como enemigo a Corea del Sur.
El comunicado del miércoles no hace mención a ningún cambio en este sentido, pero sí anunció el nombramiento de un nuevo ministro de Defensa, No Kwang Chol. El ejército norcoreano informó que comunicó su decisión a las fuerzas estadounidenses para prevenir cualquier “conflicto accidental con respecto al proyecto de fortificación lanzado en la zona clave de la frontera sur”. Las Fuerzas Armadas de Corea del Sur calificaron este anuncio como “una medida desesperada derivada de las inseguridades del régimen fracasado de Kim Jong Un” y que llevarán a “un aislamiento aún mayor” de Corea del Norte.
Fuente: AFP.