Una investigación preliminar de las autoridades libanesas muestra que los aparatos de comunicación que estallaron esta semana fueron cargados con trampas explosivas antes de entrar en el país, según una carta de la misión de Líbano ante la ONU a la que la AFP tuvo acceso este jueves.
“La investigación preliminar muestra que los dispositivos afectados fueron manipulados de forma profesional (...) antes de llegar a Líbano y su explosión fue provocada por el envío de mensajes a los aparatos”, dice la misiva enviada al Consejo de Seguridad en vísperas de una reunión sobre el asunto.
Las explosiones de estos aparatos, bípers o buscas y walkie-talkies, en bastiones del Hezbolá, dejaron 37 muertos y casi 3.000 heridos, exacerbando el temor a una guerra a gran escala en Oriente Próximo.
Israel no ha comentado el ataque, que se produjo justo después de anunciar que ampliaba sus objetivos bélicos en Gaza contra el Hamás palestino hasta la frontera con Líbano, para permitir el regreso a sus hogares de los habitantes del norte del país, desplazados por los enfrentamientos entre Hezbolá, apoyado por Irán, y el ejército israelí, que se producen casi a diario desde octubre.
En su carta al Consejo de Seguridad, la misión libanesa califica el ataque atribuido a Israel de “brutalidad sin precedentes” y compromete los esfuerzos diplomáticos para poner fin a los combates en Gaza y el sur del Líbano.
Pide al Consejo de Seguridad que condene este ataque.
A petición de Argelia, está prevista una reunión de urgencia del Consejo para el viernes, en presencia del ministro libanés de Asuntos Exteriores, Abdallah Bou Habib, según informaron a la AFP fuentes diplomáticas.
Fuente: AFP