Los sindicatos advierten que el conflicto salarial será difícil de resolver y los exportadores señalan que se retrasan pagos por millones de dólares: cinco días de huelga en la industria oleaginosa paralizan los puertos de Rosario, Argentina, uno de los mayores nodos agroexportadores del mundo.
El complejo oleaginoso de Rosario, tercer nodo portuario agroexportador mundial luego del de Nueva Orleans (Estados Unidos) y del de Santos (Brasil), está paralizado desde el martes, cuando la Federación de Trabajadores Aceiteros declaró una huelga en demanda de aumentos de salarios.
Más de 20 buques navegaban este viernes por la hidrovía del río Paraná, 300 kilómetros al norte de Buenos Aires, sin poder atracar en los puertos de carga, mientras cientos de camiones aguardan al costado de las carreteras que se resuelva el conflicto.
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“Si las empresas no quieren sentarse a negociar, va a ser difícil que levantemos la huelga”, dijo a la AFP Martín Morales, dirigente del Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (SOEA). Los sindicatos negociaron hasta el lunes con la Cámara de la Industria Aceitera (CIARA) un incremento salarial, pero la falta de acuerdo derivó en una huelga.
“El problema de este conflicto no es el salario, sino que (los exportadores) nos están utilizando para forzar al Gobierno a otra cosa”, añadió Morales en referencia a una devaluación para obtener más pesos por dólar liquidado de las exportaciones.
La agroindustria ha retrasado sus exportaciones al considerar que en Argentina hay un dólar bajo, al que se le suma la caída del precio internacional de la soja. De acuerdo a los datos de CIARA, la liquidación de divisas en los primeros siete meses del año es apenas un 5,2% superior al mismo período de 2023, cuando Argentina sufrió la peor sequía del último medio siglo.
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En un comunicado difundido este viernes, CIARA señaló que “se lamenta profundamente por la falta de diálogo y voluntad real de llegar a un acuerdo” por parte de los sindicatos, a los que acusó de no querer negociar.
El presidente de la Cámara, Gustavo Idígoras, dijo a la prensa local que la huelga implica el pago de una multa de “50.000 dólares por barco cada día”. “Y perdemos mercados, porque los compradores se van a Brasil”. Además, indicó, el retraso de hasta 200 millones de dólares diarios de liquidaciones por ventas tendrá consecuencias en los ingresos de divisas del próximo mes.
Fuente: AFP.