Más de 9.000 personas fueron evacuadas desde el viernes en la noche en el noreste de Canadá debido a un incendio forestal que está “fuera de control” y es atizado por fuertes vientos, reportaron las autoridades.
Los residentes de Labrador City y Wabush, en la provincia de Terranova y Labrador, recibieron orden de abandonar sus casas, según el portavoz provincial de los bomberos, Jeff Motty. “Estamos viendo un comportamiento extremo del fuego, se mueve unos 50 metros por minuto”, explicó el oficial, agregando que la intensidad de las llamas hizo imposible usar los bombarderos de agua.
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En imágenes difundidas en las redes sociales se vieron filas de autos esperando abastecerse de gasolina en las estaciones, y el cielo oscurecido por enormes nubes de humo. “Fue un shock ver tanto humo. Y ha estado así, en el mismo lugar, durante horas”, dijo Stacy Hunt, residente de Labrador City, al canal CBC.
“No tenemos muchas opciones, el único lugar donde puedes ir es hacia Happy Valley Goose Bay”, agregó. Este sábado por la mañana la alcaldesa de Labrador City, Belinda Adams, exhortó a los residentes a evacuar. “El incendio aún está activo”, alertó en un video en las redes sociales.
Las autoridades federales dijeron el viernes que el clima era bastante favorable para limitar los incendios desde el inicio del verano, pero el país está llegando al pico de la temporada de fuegos. El año pasado, Canadá registró la peor temporada de incendios en su historia, con 15 millones de hectáreas quemadas y más de 200.000 evacuados.
Las condiciones más secas y calurosas en varias regiones del país, causadas por el cambio climático, aumentaron el riesgo de incendios mayores, según los expertos. Actualmente hay 575 fuegos activos, de los cuales más de 400 están considerados como fuera de control.
Fuente: AFP
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Aire contaminado de incendio forestal ya llega a Asunción
Un incendio forestal de gran magnitud se registra en la zona del Chovoreca, frontera con Bolivia, y preocupa a los bomberos voluntarios que están tratando de sofocar el fuego, para que no afecte a las comunidades indígenas asentadas en territorio chaqueño. Incluso en Asunción y en gran parte del país se reporta las consecuencias de la quemazón que contamina el aire.
El incendio en el cerro Chovoreca se habría iniciado ya la semana pasada, según los pobladores, y fue a raíz de trabajos de desmonte realizados en la estancia Clemencia SA, que sería propiedad del brasileño Tomás Reis.
Según los primeros informes, el siniestro se dio en un área protegida y hábitat de indígenas de totobiegosode y silvícolas (aún no civilizados y, por ende, están aislados de la población).
Para los pobladores no hay dudas de que el incendio fue intencional en la propiedad del estanciero extranjero, donde desde el lunes pasado se procedió a la quema de colleras (leñas secas) productos de la deforestación.
Aseguran que se le advirtió al dueño de la hacienda de las consecuencias que podría ocasionar la quema, considerando el clima seco y fuertes vientos imperantes en la zona, pero al parecer el hombre dio otras directivas a los personales que procedieron a quemar los troncos de los árboles talados.
El impacto ambiental es asombroso e inclusive llega a la capital del país y ciudades circundantes.
Se alertó que se reporta un nivel perjudicial de contaminación del aire en gran parte del país.
TEMPERATURA ALTA
Esta semana el tiempo se presentará con ambiente caluroso, según el pronóstico de la Dirección de Meteorología e Hidrología (DMH). Se espera para hoy temperatura máxima de 41 grados.
Al menos hasta la mitad de semana, se esperaría un ambiente caluroso en gran parte del país, con temperaturas máximas que oscilarían entre 31 a 41 °C, con vientos que serían predominantes del sector norte, y no existe probabilidad de lluvias.
RECOMIENDAN REDUCIR ACTIVIDADES
El Ministerio de Salud emitió recomendaciones ante la mala calidad del aire que se registra en el país, principalmente reduciendo las actividades que requieran esfuerzo prolongado o intenso al aire libre. A través del Vigilancia de la Salud se indicó que el valor actual es moderado, aunque con un índice “perjudicial” según diversas mediciones en Asunción.
De acuerdo al portal IQair, la concentración de PM2,5 en Asunción es actualmente 16.8 veces superior al valor guía anual de calidad del aire de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Este indicador se refiere a las partículas en suspensión de menos de 2,5 micra, es decir, son 100 veces más delgadas que un cabello humano, por tanto, tienen efectos más severos sobre la salud que las más grandes, PM10.
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Chovoreca: incendio forestal perjudica a nativos, incluso aire contaminado ya llega a Asunción
Un incendio forestal de gran magnitud se registra en la zona del Chovoreca, frontera con Bolivia y preocupa a los bomberos voluntarios que están tratando de sofocar el fuego, para que no afecte a las comunidades indígenas asentadas en territorio chaqueño. Incluso en Asunción y en gran parte del país se reporta las consecuencias de la quemazón que contamina el aire.
El incendio en el Cerro Chovoreca se habría iniciado ya la semana pasada, según los pobladores y fue a raíz de trabajos de desmonte realizados en la estancia Clemencia S.A., que sería propiedad del brasileño Tomás Reis.
Según los primeros informes, el siniestro se dio en un área protegida y hábitat de indígenas de Totobiegosode y silvícolas (aún no civilizados y por ende están aislados de la población).
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Cielo cubierto por humo rojizo
Para los pobladores no hay dudas de que el incendio fue intencional en la propiedad del estanciero extranjero, donde desde el lunes pasado se procedió a la quema de colleras (leñas secas) productos de la deforestación.
Aseguran que se le advirtió al dueño de la hacienda de las consecuencias que podría ocasionar la quema, considerando el clima seco y fuertes vientos imperantes en la zona, pero al parecer el hombre dio otras directivas a los personales que procedieron a quemar los troncos de los árboles talados.
El impacto ambiental es asombroso e inclusive llega a la capital del país y ciudades circundantes. Se puede observar que el aire es pesado y el cielo está cubierto por el humo rojizo.
Se alertó que se reporta un nivel perjudicial de contaminación del aire en gran parte del país. Según reportes de IQAIR, la concentración de PM2,5 en Asunción es actualmente 13.6 veces superior al valor guía anual de calidad del aire de la Organización Mundial de la Salud (OMS), lo que representa un índice “perjudicial” para quienes se expongan, informó la 1020 AM.
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Invierno paraguayo: la esencia de una estación que este año se hizo sentir
El cambio climático es una realidad cuyos efectos sentimos día a día con las alteraciones del clima: frío intenso, olas de calor, tormentas, inundaciones, sequías y sus respectivos efectos.
- Por Carolina Vanni
- carolina.vanni@nacionmedia.com
- Fotos: Archivo
“¡Por fin hace frío! A mi edad prefiero este clima. Me abrigo y estoy bien. Cuando hace calor no sabemos ni qué ponernos, salimos afuera y el sol quema”, dice Mercedes Lagraña, de 71 años, quien creció con las estaciones del año bien definidas. Ella es hipertensa y dice que en invierno está mejor, pero los médicos advierten sobre el aumento de las probabilidades de infarto en personas hipertensas en los días fríos.
En julio el invierno se hizo sentir en Paraguay con una semana de temperaturas muy bajas. En Pilar el termómetro marcó 0,2 °C, en San Juan Bautista, Caazapá y Paraguarí se registraron temperaturas de 1 °C, por citar algunos. El mes de agosto también registró varios días fríos.
Mercedes está en su casa tomando mate con su hija Melissa (41) y reflexiona: “El invierno de ahora ya no es tan frío”. Mientras, su hija le recuerda que mucha gente no tiene cobijo y que, quizás, es mejor que no baje tanto la temperatura: “Para ellos no debe ser agradable el frío”, le dice.
Para los días con temperaturas menores a 10 °C, la Secretaría de Emergencia Nacional tiene habilitados albergues para las personas en situación de calle. El frío golpea por igual y no todos tienen las mismas condiciones de abrigo, de transporte y de vida, por lo que muchas familias con recursos limitados deben soportar las bajas temperaturas en precarias condiciones.
INVIERNOS CÁLIDOS
El cambio climático es una realidad cuyos efectos sentimos día a día con las alteraciones del clima: frío intenso, olas de calor, tormentas, inundaciones, sequías y sus respectivos efectos. Paraguay emite 62 millones de toneladas de carbono, según el último inventario de 2019, lo que representa el 0,09 % a nivel global.
“Las alteraciones se manifiestan en eventos extremos, el frío extremo y el calor extremo. No podemos mirar solo Paraguay, hay que ver qué ocurre en el resto del mundo”, comenta el director de Cambio Climático y Políticas de WWF Paraguay, Óscar Rodas. Él atribuye a La Niña este invierno seco y frío, además de lamentar la falta de sistemas que puedan prevenir sobre el comportamiento del clima a largo plazo.
Paraguay sufre los efectos de la crisis del clima al ser un país en desarrollo, lo que hace que el día a día de la gente sea más penoso, afectando la calidad de vida y poniendo en peligro la producción primaria, lo que incide en la economía y en la seguridad alimentaria de la población.
Mercedes recuerda que en su juventud las primeras heladas venían a finales de mayo. Y su memoria es buena, pues el “Estudio del clima en Paraguay”, una investigación científica de Benjamín Grassi, resalta que en los últimos 30 años aumentó 1,5 °C la temperatura media en el país.
Por la inestabilidad climática, los inviernos se volvieron cálidos y aunque este año se registraron varios días fríos no fue por mucho tiempo. Esta es la característica del invierno paraguayo en los últimos 10 a 15 años: amaneceres y noches frescas, pero días agradables, señaló Eduardo Mingo, titular de la Dirección de Meteorología e Hidrología. En los años 2021 y 2020 se han tenido valores bastante bajos, pero “el invierno de este año mostró un frío persistente”, lo que resulta más llamativo, sostiene Mingo. Mercedes recuerda que aproximadamente hasta 1990 los desfiles estudiantiles con carrozas y flores que se realizan en setiembre por la llegada de la primavera tenían lugar todavía con temperaturas muy bajas. Dice que los meses de julio y agosto eran muy fríos y ella caminaba 5 km para ir a la escuela. “Llegaba con los pies congelados. Si había helada, iba más despacio, parecía que no podía moverme”, rememora.
ALTERACIÓN CLIMÁTICA
Mingo explica que la percepción de “normalidad” cambió, pero que no se debe confundir “lo normal con lo típico” al indicar que “lo normal es el frío en esta época del año”. “Este año se registraron algunas temperaturas extremas, al igual que en 2021 y 2022, incluso récord para un día, pero pronto volvió el calor”, asevera.
El clima ha cambiado tanto que “la alteración de las corrientes de viento de alto nivel en la atmósfera hace que el frío polar no se manifieste en los polos, sino en otras zonas del planeta”, como ocurrió recientemente en Argentina, donde hizo más frío que en la Antártica, explica Rodas.
Aunque las bajas temperaturas en Paraguay no sean “paralizantes” como en otros puntos del planeta, cuando se presentan tienen su impacto porque la gente ya no está acostumbrada. Este año se dieron varias jornadas frías, sumadas al cielo nublado y la lluvia, que resultaron en días intensos para mucha gente.
La gente consumió más calorías e hizo menos ejercicio al aire libre, acudió menos a los eventos sociales, aumentaron las enfermedades respiratorias agudas, afectando especialmente en los extremos de la vida: niños menores de 2 años y mayores de 60 años edad, además de las personas alérgicas.
La Dirección de Vigilancia Sanitaria del Ministerio de Salud informó que el virus sincitial respiratorio es el más común, seguido de los casos de influenza AH3N2. Pero no son los únicos virus que circulan, también están el SARS-CoV2, influenza, metapneumovirus y otros.
QUÉ HACER
La Convención Marco de Cambio Climático de 1992, de la que Paraguay es parte, anima a los Estados a reducir las huellas de carbono, a cooperar en investigaciones y tecnología para proteger los sumideros de gases de efecto invernadero.
La Ley N° 5875 “De cambio climático” establece un marco general normativo para planificar y responder, de manera urgente, adecuada, coordinada y sostenida, a los impactos del cambio climático. Mientras se fomentan comunidades más resilientes, la meta global de Paraguay es 20 % de reducciones con base en el comportamiento de las emisiones proyectadas al 2030.
“Pretender que una actividad no genere emisiones es imposible. El punto es cómo vamos a desarrollar esas actividades con la menor cantidad de emisiones y cómo podemos compensar: reforestación, mejores sistemas de reutilización de ciertos productos, etc.”, explica Ethel Estigarribia, directora de Cambio Climático del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades).
Una iniciativa bajo el “paraguas de cambio climático” es la provisión de agua a las comunidades del Chaco, donde el Mades, junto con el PNUD, están proveyendo de tanques de 5.000 litros a las familias indígenas de Alto Paraguay y Boquerón.
La titulación de los espacios de áreas silvestres y protegidas también forma parte de la política aplicada para atender la problemática. “Con la titulación de esos espacios les damos soberanía y protección jurídica”, asegura Ethel Estigarribia.
ACCIONES QUE SUMAN
Aunque la mayor responsabilidad para mitigar los efectos del calentamiento global está en manos de las autoridades, a quienes debemos exigir el cumplimiento de los acuerdos y metas, cada uno puede aportar su grano de arena desenchufando los electrodomésticos en desuso, evitar la quema de basura, usando racionalmente el agua, evitando tirar basura en los raudales, reciclando y reutilizando materiales, entre otras acciones.
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“La Niña” anuncia un verano caliente
Por Carolina Vanni
carolina.vanni@nacionmedia.com
Tamara Esquivel, estudiante de enfermería, se queja porque la temperatura bajó y ella debe madrugar para ir a la facultad. Si no sube en el bus a las 5:40 no podrá llegar al centro de Asunción para entrar a las 8:00 en la clase.
La joven de 20 años vive en la ciudad de Julián Augusto Saldívar, a unos 23 kilómetros de la capital, y si bien la distancia no es demasiada, el mal servicio del transporte público y las pésimas condiciones de la ruta Departamental 27 hacen que el trayecto se vuelva largo y tedioso.
Estando en la parada de su barrio comienza a lloviznar y sopla un viento frío que la obliga a acomodar su bufanda y luego meter las manos en los bolsillos. En su barrio ninguna esquina tiene refugio para quienes esperan el bus, por lo que, debe soportar la condición climática hasta que se suba en el bus.
Esta realidad es la de miles de personas que a diario deben transportarse en colectivo desde las afueras de Asunción hasta el centro. Si bien el verano dejó de ser agradable debido a las elevadas temperaturas, “resulta más llevadero”, dice Tamara a LN.
Veranos infernales
Los veranos están cada vez más calientes y los inviernos se van volviendo cálidos. En los últimos años, Paraguay sufrió una alteración en su clima, efecto del calentamiento global que se da a consecuencia del aumento de los gases de efecto invernadero.
Un trabajo realizado por el profesor Benjamín Grassi, denominado Estudio del Clima en Paraguay, indica que el año 2019 fue el más caliente en nuestro país con una temperatura de 1,5 °C por encima del promedio del período 1961-1990.
“El cambio climático es una realidad innegable que nos está afectando. Pero no es solo un problema ambiental, es también un problema social, económico y de seguridad”, nos dice Ethel Estigarribia, directora de Cambio Climático del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades).
En consecuencia del aumento de la temperatura promedio en el país, las olas de calor aumentaron en un 72% más con relación a la era preindustrial y los veranos son tres veces más calientes, según el mismo estudio. Sin dudas, Paraguay es vulnerable al cambio climático, por su ubicación, su clima, la falta de infraestructura para el desarrollo, lo que incide en la calidad de vida de la gente.
Este año el país sufrió los embates del calentamiento con temperaturas nunca antes registradas. La sensación térmica llegó, inclusive, a los 50 °C, el 15 de marzo pasado en que la gente debió soportar una siesta infernal. ¿Es proporcional la vulnerabilidad con relación a la responsabilidad en la problemática? No. Paraguay aporta solo el 0,09% de la emisión de gases, pero sufre las consecuencias a causa de la pobreza y desigualdad.
Aumento de la temperatura global
El director de la Oficina Regional para las Américas de la Organización Meteorológica Mundial, Julián Báez, explica que, si acá hace mucho frío ahora, en el norte el verano es mucho más extremo, sin embargo, al hacer un promedio del año, el termómetro cada vez sube más, asegura a LN.
Según la Organización de las Naciones Unidas, la temperatura media de la Tierra es ahora 1,1 °C más elevada que a finales del siglo XIX. Pero el dato alarmante lo dio en febrero de este año el Servicio de Cambio Climático Copernicus de la UE, al asegurar que, en el período comprendido entre febrero de 2023 y enero de 2024, la temperatura aumentó 1,52 °C.
“Hay una clara evidencia científica de que en los últimos años hemos tenido un aumento sostenido en la temperatura media del planeta”, sostiene a LN Julián Báez. Esta variación se ve reflejada en las distintas regiones con la ampliación de los eventos climáticos, explica.
Para este año nuevamente está pronosticado el fenómeno climático La Niña. Eso significa que el verano será mucho más cálido, afectando no solo a la agricultura, sino además a la navegabilidad de los ríos, que ya actualmente está bastante resentida por la alarmante bajante, producto de la falta de lluvias y dragado. En Paraguay, más del 90% de la producción primaria se mueve por la hidrovía.
“Si llueve menos el principal sector que se ve afectado es el de la agricultura y la ganadería. Y el otro sector es el fluvial, y dependiendo de la intensidad, si sigue el déficit de lluvia, también puede afectar a la producción de energía. No siempre se dimensiona el impacto, pero mirando todos los aspectos, resultan desoladores”, asegura Báez.
Acciones
En el 2014 se presentó el Plan Nacional de Cambio Climático, que, en su fase I tiene por objetivo trabajar las estrategias de mitigación, orientados por un planeamiento a largo plazo y a crear comunidades resilientes al cambio climático. La mitigación, en términos de cambio climático, es reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Según explica Ethel Estigarribia, Paraguay necesita de 16.200 millones de dólares para poder implementar las medidas de mitigación y 6.530 millones de dólares para poder implementar medidas de adaptación.
Sostiene que elaborar los planes para reducir la huella de carbono es todo un desafío, porque no es solo decir cuáles son las metas, sino que debe tener un sistema de monitoreo. “Hay que tener indicadores y se tiene que poder medir. Y la única herramienta es la ciencia, se tiene que contabilizar todas las acciones que tenemos. Lo que necesitamos es financiamiento”, asegura.
Entre los proyectos que trabaja el Mades con otras instituciones está la reducción de las emisiones en la agricultura y la ganadería, así como también la movilidad, donde no solo se busca la incorporación de buses eléctricos y mejorar el sistema de transporte público para usar menos vehículos particulares.
“Estamos trabajando para ver si hay modelos sostenibles para la agricultura y la ganadería. Este año vamos a tener el inventario de los cinco sectores que más generan las emisiones”, dice al indicar que “el inventario” es el espejo del desarrollo económico, donde se va a reflejar las actividades que generan mayores emisiones.
Una de las actividades que más genera emisiones en nuestro país es el cambio del uso del suelo, que lleva a la deforestación para ampliar los horizontes de la ganadería y la agricultura, también generadores de emisiones. El Instituto Forestal Nacional (Infona) cuenta con un Sistema de Alertas Tempranas de Deforestación, buscando abordar de manera efectiva la deforestación ilegal, considerando que gran parte de la deforestación en el país es legal.
¿Qué hago como ciudadana?
Aunque la mayor emisión de gases de efecto invernadero se genera en las actividades económicas de gran escala, la ciudadanía puede ayudar a mitigar con pequeñas acciones: mantener las veredas en buen estado para caminar y no usar su automóvil, así como usar transporte público antes que el particular.
Otra acción ciudadana que puede ayudar es comprar preferentemente productos locales y comer más frutas y verduras. No arrojar basura en las calles, que luego terminan en los cauces hídricos.