El presidente de Filipinas, Ferdinand Marcos (h), afirmó el domingo que “nunca se dejará intimidar” por China, después de una violenta disputa entre barcos de la marina de su país y guardacostas chinos en el mar de China Meridional.
“Nunca nos dejaremos intimidar ni oprimir por nadie”, declaró Marcos durante una visita a las fuerzas filipinas en el mar de China Meridional, donde entregó medallas a los marinos involucrados en el enfrentamiento del lunes, cerca del disputado banco de arena Ayungin, llamado Second Thomas Shoal en inglés.
La confrontación ocurrió cuando las fuerzas filipinas intentaron reabastecer a sus marinos instalados en un ruinoso barco colocado intencionalmente en 1999 sobre el atolón para defender su reclamo territorial en la zona.
Marcos calificó el incidente como “peligroso”, pero aseguró a los soldados que “la historia misma puede decir que (...) nunca en la historia de Filipinas hemos cedido a potencias extranjeras”.
Imágenes divulgadas por las autoridades filipinas mostraron a los guardacostas chinos armados con palos, cuchillos y un hacha para golpear los barcos filipinos.
Manila acusó al personal chino de “saquear” bienes de sus barcos, incluidas siete armas, y le exigió reparar el equipo dañado en la agresión.
Fuente: AFP