El presidente del Consejo de Ministros de Perú, Gustavo Adianzén, anunció ayer miércoles la prórroga del estado de emergencia en la provincia de Trujillo, Putumayo, Mariscal Castilla y Pataz, en el norte del país, que fue decretado a mediados febrero por el aumento de la criminalidad y que se extendió a otras provincias.
“(Adianzén) anunció también la prórroga del estado de emergencia tanto en la provincia de Trujillo, en La Libertad, así como en las provincias de Putumayo y Mariscal Castilla, en Loreto, para optimizar las acciones de lucha contra la criminalidad. En la misma línea, expresó, se realizará lo propio en Pataz”, reza un comunicado del Gobierno peruano.
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Además, indicó que la Policía Nacional, apoyadas por el Ejército, pasará a tener el control del “orden interno” en Pataz, donde un grupo de presuntos mineros ilegales relacionados con elementos criminales volaron dos torres de alta tensión hace varios días en la mina Poderosa.
Por su parte, el Ministerio de Interior peruano informó en su cuenta de la red social X que está trabajando para extender la declaración del estado de emergencia en la región de Arequipa, en el sur del país, para “reforzar la seguridad y seguir combatiendo con firmeza el crimen”.
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El estado de emergencia fue declarado por el entonces primer ministro de Perú, Alberto Otárola, en Trujillo y Pataz, donde el Ejército y la Policía pasaron a tomar el control del orden interno de forma conjunta con las autoridades regionales y locales por el auge de la minería ilegal vinculada a bandas organizadas. La medida incluye la suspensión de atención en locales comerciales, eventos sociales y espectáculos desde las 00:00 a las 4:00.
Fuente: Europa Press