Un inusual sismo de magnitud 4,8 seguido por una réplica sacudió el viernes pasado los alrededores de Nueva York, haciendo temblar ligeramente durante unos segundos numerosos barrios de la Gran Manzana e interrumpiendo una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU sobre Gaza.
El terremoto se produjo “a las 14:23 GMT (10:23 hora local), 7 kilómetros al noreste de Whitehouse Station, Nueva Jersey”, el estado fronterizo de Nueva York, al otro lado del río Hudson, y a una profundidad de 5 kilómetros, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
Una réplica de magnitud 4 fue registrada a las 21:59 GMT (17:59 locales) también en Nueva Jersey, informó el USGS. No se reportaron heridos o daños significativos. El primer temblor se sintió en numerosos barrios de los distritos de Manhattan y Brooklyn, provocando una movilización general de los medios de comunicación estadounidenses y una avalancha de mensajes en las redes sociales.
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Dominika Uniejewska, gerente de una tienda en Lebanon, Nueva Jersey, epicentro del terremoto, dijo a la AFP que “estaba dormida” cuando ocurrió el sismo. “Al principio no entendía lo que estaba pasando porque nunca había experimentado un terremoto tan fuerte”.
“Toda la casa temblaba mucho, la cama temblaba y, hacía ruido, un ruido muy fuerte”, señaló. En Brooklyn, los edificios se remecieron, haciendo sonar puertas de armarios y accesorios, según un corresponsal de la AFP. “Estoy nerviosa, estoy temblando. Dios mío (...), eso nunca ha pasado aquí (...). Mucha gente está asustada”, afirmó Ana Villagrán, una residente de 62 años a la AFPTV.
El presidente Joe Biden fue informado de los hechos y la Casa Blanca se puso “en contacto” con funcionarios federales y locales, según su portavoz Karine Jean-Pierre. “Las cosas han vuelto a la normalidad”, aseguró poco después el mandatario.
Icónico rascacielos
“Todavía estoy bien”, bromeó tras la réplica la cuenta en la red social X del icónico rascacielos Empire State Building, que después del primer sismo ya había dicho en tono de humor que estaba en buenas condiciones. Los habitantes de la ciudad también publicaron fotografías de sillas de jardín volcadas con mensajes irónicos como “Lo reconstruiremos”. Pero las autoridades instaron a la precaución. “No tenemos información en este momento sobre daños significativos (pero) seguimos evaluando la situación”, escribió en X Fabien Levy, portavoz del alcalde de Nueva York Eric Adams.
En la sede de Naciones Unidas, las cámaras que filmaban una reunión del Consejo de Seguridad sobre la crisis humanitaria en Gaza comenzaron a temblar. La representante de la ONG Save the Children, Janti Soeripto, interrumpió un discurso en el que hablaba de hambruna y muertes. “¿Es un terremoto?”, preguntó.
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La reunión fue suspendida por segunda vez cuando los teléfonos empezaron a sonar y vibrar debido a las alertas automáticas de emergencia enviadas por el municipio. La Agencia Estadounidense de Aviación Civil (FAA) advirtió que los aeropuertos del noreste podrían encontrar dificultades, mencionando los de Nueva York, Nueva Jersey, Filadelfia y Baltimore, Maryland.
Pero el aeropuerto JFK de Nueva York informó en X que seguía “abierto y operativo” y que “los aviones están despegando y aterrizando”. “Los terremotos son raros, pero no imposibles, a lo largo de la costa atlántica, una región llamada por los geólogos ‘margen pasivo-agresivo’ para describir la zona donde se encuentran la placa atlántica y la de América del Norte”, según el USGS.
Fuente: AFP.