“Si no podemos ver el juicio de la Haya en la vida real, veámoslo en el teatro”, declaró la autora de una aclamada obra satírica que está causando sensación en Bulgaria, en la que el presidente ruso Vladimir Putin y sus aliados son juzgados por crímenes de guerra. La obra “La Haya”, de la autora ucraniana Sasha Denisova, cuenta la historia de un adolescente huérfano de Mariúpol que imagina cómo los altos mandos de Rusia son llevados ante la justicia por su devastadora guerra en Ucrania.
Vladimir Putin es actualmente objeto de una orden de arresto emitida en marzo por la Corte Penal Internacional (CPI), por acusaciones de haber deportado niños en zonas de Ucrania ocupadas por Rusia, aunque Denisova ya había escrito la obra entonces. Tras estrenarse en Polonia y Estados Unidos a principios de año, el célebre director invitado Galin Stoev adaptó la obra para el público búlgaro, con la intención de desafiar el sentimiento pro-Kremlin del país balcánico.
En la obra, escenificada actualmente en el Teatro Nacional de Sofía, la actriz búlgara Radena Valkanova interpreta a Putin, con un elegante traje negro y zapatos rojos. “Debemos reírnos sin piedad de Putin”, afirmó Denisova a la AFP, al igual que Charles Chaplin se burló de Adolf Hitler en “El gran dictador”.
Lea más: Milei viajó a Estados Unidos para presentar su plan económico
‘Reveladora’
En Bulgaria, miembro de la Unión Europea y de la OTAN, pero históricamente cercana a Rusia, todavía hay muchos ciudadanos nostálgicos de lo que consideran los días de gloria del Imperio ruso y la Unión Soviética. La nostalgia también remite a Rusia como protectora de los pueblos eslavos de Bulgaria frente al dominio otomano.
Algunos estudios sugieren que 30 % de los búlgaros son pro-Putin, lo que empujó a Stoev a crear una adaptación “reveladora” de la obra en Sofía. Y parece haber dado en el blanco. “El público está profundamente conmovido y hace preguntas”, explicó Stoev a la AFP, después de que los actores recibieran otra ronda de aplausos del auditorio.
Lea también: ¿Qué es la COP28, cumbre climática en Dubái?
Sin embargo, el principal desafío es adaptar constantemente el guión para reflejar el estado actual de la guerra. Julian Vergov -- que interpreta al jefe del grupo mercenario ruso Wagner, Yevgeni Prigozhin -- admitió que trabajar con un guión cambiante es un reto. Tanto el motín fallido de Prigozhin como su muerte en un accidente aéreo tuvieron que ser añadidos, dejando su destino en entredicho.
“La obra es ficción, pero al fin y al cabo interpretas a un personaje real, que luego muere durante los ensayos. Es impresionante”, afirmó Vergov. La compañía también tiene que estar al tanto de los últimos rumores sobre el estado de salud del dirigente checheno Ramzan Kadírov y del presidente ruso.
‘Opiniones polarizadas’
Entre todos los elogios, los detractores de la obra la critican considerando que es un “vodevil propagandístico sesgado”. Un actor declinó supuestamente un papel por motivos ideológicos. “Con este espectáculo, invitamos a los espectadores a reflexionar sobre hechos reales” y a sacar sus propias conclusiones, replicó el director Vasil Vasilev.
“La politización es justamente lo contrario: cuando nos dicen lo que debemos pensar y hacer”, añadió. La imitadora de Putin, Valkanova, se mostró contenta de que la obra haya suscitado “opiniones muy polarizadas”, considerando que son “el propósito de este tipo de teatro”. “Me alegra que haya algo así para despertar el pensamiento de la gente, algo de lo que carecemos como nación”, afirmó. Galin Stoev espera poder representar la obra en el futuro en las zonas rurales de Bulgaria, conocidas por ser susceptibles al sentimiento prorruso.
Fuente: AFP.