La activista iraní Narges Mohamadi, premio Nobel de la Paz en 2023, comenzó este lunes una huelga de hambre en la cárcel para protestar por la falta de asistencia médica y denunciar que las autoridades de la República Islámica sigan imponiendo el uso del hiyab para las mujeres, informó su familia en un comunicado.
Irán “es responsable de todo lo que le pase”, sentenciaron los familiares, al dar cuenta públicamente de un mensaje que Mohamadi les habría trasladado desde la cárcel de Evin, donde cumple condena por varios delitos que, según organizaciones defensoras de los Derechos Humanos, guardan relación con su activismo político.
Mohamadi supuestamente llevaba una semana pidiendo su traslado al hospital para recibir asistencia médica, ya que un médico de la propia cárcel consideró que necesitaba ser evacuada de “urgencia” a un centro de atención cardiaca y pulmonar. La nota no aclara exactamente cuál sería la dolencia de la activista.
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Ante esta demora, decidió iniciar una huelga de hambre para protestar por la recurrente falta de asistencia médica a los reclusos enfermos y por “la política de ‘muerte’ o ‘hiyab obligatorio’” que impera en Irán, motivo de debate público especialmente en el último año a raíz de la muerte bajo custodia de la joven Mahsa Amini, detenida por llevar mal el velo.
El Comité Noruego del Nobel reconoció a principios de octubre la labor de Mohamadi, poniendo en valor “su lucha contra la opresión de las mujeres en Irán y su lucha para promover los Derechos Humanos y la justicia para todos”. Mohamadi, de 51 años, pasó la mayor parte de los últimos 20 años de su vida en prisión y fue condenada hasta en cinco ocasiones hasta acumular una pena total de 31 años de cárcel.
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Fuente: Europa Press
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EE. UU.: universitarios inician huelga de hambre en apoyo a Gaza
Al menos 14 estudiantes de la Universidad de Princeton, al suroeste de Nueva York, han iniciado una huelga de hambre indefinida en solidaridad con la población de la Franja de Gaza, objeto de una ofensiva militar israelí. Los manifestantes llevan diez días acampados en el campus en la Acampada de Solidaridad con Gaza.
La huelga de hambre ha comenzado ayer viernes y continuará hasta que se satisfagan sus demandas: reunión con la dirección de la universidad para tratar las inversiones relacionadas con Israel y propuestas de desinversión y boicot cultural y académico a Israel, ha informado la organización de la protesta.
Los participantes en la huelga de hambre han manifestado su solidaridad con el pueblo de Gaza y de Palestina “que ha sido sistemáticamente sometido a la hambruna y privado de alimentación en lo que es ya uno de los peores desastres humanitarios de la historia humana”.
También piden la amnistía por las sanciones penales y disciplinarias impuestas a los participantes en la protesta y dar marcha atrás a las prohibiciones de acceso al campus y las expulsiones de estudiantes de los colegios mayores, según recoge el portal de noticias North Jersey. Un total de 15 manifestantes fueron detenidos el lunes en esta universidad y cientos los arrestados en otras protestas propalestinas en universidades de todo Estados Unidos.
“Millones de gazatíes siguen sufriendo el asedio del Estado de Israel. Dos millones de habitantes ahora afrontan una hambruna provocada. Uniros en solidaridad con el pueblo palestino”, han emplazado los convocantes de Desinversión contra el Apartheid Israel de Princeton.
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Fuente: Europa Press
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Exsenador duda que huelga de polémica legisladora interese a la ciudadanía
El exsenador y referente del Frente Guasu, Hugo Richer, se refirió a la medida de fuerza adoptada por la senadora Kattya González de ir a una huelga de hambre ante un supuesto plan de impulsar su pérdida de investidura por el caso del comisionamiento del funcionario José Luis Torales de la Contraloría General de la República, que estuvo a su cargo como asesor en el Congreso Nacional.
“Yo particularmente considero que la huelga de hambre es una medida extrema, diría casi el final del camino, y la huelga de hambre tiene que tener necesariamente un respaldo pleno, colectivo social, activo y movilizado, porque de lo contrario quedan como medidas individuales”, indicó Richer, este lunes, en entrevista con La Nación/Nación Media. ”Yo tengo mis observaciones críticas sobre la medida de huelga de hambre, porque eso tiene que movilizar socialmente a la ciudadanía y tengo mis dudas que eso ocurra en este momento”.
Así mismo, sostuvo que este tipo de acciones no ayudan a recomponer a la oposición que sigue sin encontrar un rumbo tras la derrota en las elecciones nacionales de abril del 2023. “No creo que esa sea la manera de enfrentar a la mayoría del cartismo en este momento en la Cámara de Senadores y, en segundo lugar, no creo que eso ayude a la necesidad urgente de componer a la oposición en el Paraguay”, apuntó.
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Richer indicó que la pérdida de investidura, que no pasa de rumores hasta el momento, no corresponde para la senadora. “Si realmente existe la intención, a mí no me consta, de impulsar la pérdida de investidura de la senadora González, creo que se estaría pasando un límite muy peligroso, primero porque yo particularmente no veo ningún tráfico de influencia de lo que allí ocurrió”, señaló el exparlamentario.
“En esta tarea que tenemos de reorganizar la oposición, tenemos un problema, necesitamos primero explicarle a la gente qué es lo que está pasando, yo puedo asegurar que mucha gente no sabe ni qué es lo que está pasando, no entiende la enmienda, no entiende la cuestión tributaria. Hay un problema de nosotros que tenemos que salir a explicar a la gente y después tomar las medidas extremas o no extremas”, puntualizó Richer a Nación Media.
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Entregan el Nobel de la Paz 2023 en ausencia de su ganadora
La prestigiosa ceremonia de entrega del Nobel de la Paz tendrá lugar este domingo con una ausencia notable: la de su ganadora, la activista iraní Narges Mohammadi, encarcelada en su país y representada por sus hijos en Oslo.
Mohammadi, que protesta contra el uso obligatorio del velo para las mujeres y la pena de muerte en Irán, ha sido detenida y condenada en numerosas ocasiones en las últimas décadas. Desde 2021 está encarcelada en la prisión de Evin en Teherán.
La activista de 51 años, que fue nombrada ganadora del Nobel de la Paz en octubre “por su lucha contra la opresión de las mujeres en Irán y su combate por promover los derechos humanos y la libertad para todos”, estará ausente durante la ceremonia de entrega del premio, que tendrá lugar a las 13:00 (12:00 GMT) en el ayuntamiento de la capital de Noruega.
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Sus mellizos de 17 años, Ali y Kiana, recibirán el galardón en su nombre y leerán un discurso que logró transmitir desde la cárcel. Según su familia, la ganadora iniciará simultáneamente una huelga de hambre en solidaridad con la comunidad bahaí, la mayor minoría religiosa de Irán, que afirma estar discriminada en muchos ámbitos de la sociedad.
Mohammadi, de salud delicada, estuvo en huelga de hambre unos días a principios de noviembre porque las autoridades penitenciarias no querían trasladarla al hospital por no querer cubrirse la cabeza con un velo.
Es una de las principales figuras del movimiento de protesta “Mujer, Vida, Libertad” en Irán, desencadenado por la muerte bajo custodia policial, el año pasado, de Mahsa Amini, una kurda iraní de 22 años detenida supuestamente por vulnerar el estricto código de vestimenta que rige en el país para las mujeres.
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¿Volver a verla con vida?
Sus dos hijos están exiliados en Francia desde 2015 y hace nueve años que no ven a su madre. Ninguno de los dos sabe si volverán a verla con vida. “Merece la pena sacrificarse y dar la vida por la causa ‘Mujeres, Vida, Libertad’, por la libertad en general y por la democracia, porque al final estas tres cosas no tienen precio”, declaró Kiana en una rueda de prensa el sábado.
“En lo que respecta a volver a verla viva algún día, personalmente, soy bastante pesimista”, confesó. “Quizá la vea dentro de 30 o 40 años, pero si no es así, no creo que vuelva a verla nunca. Pero no pasa nada porque mi madre siempre estará conmigo en mi corazón y con mi familia”.
Su hermano, Ali, se mostró “muy muy optimista”. “Creo en nuestra victoria”, afirmó, aún previendo que el reencuentro no ocurrirá “ni en dos, cinco o diez años”.
Las protestas en Irán fueron duramente reprimidas. Según la ONG Iran Human Rights (IHR), 551 manifestantes, entre ellos decenas de mujeres y niños, murieron a manos de las fuerzas de seguridad, y miles más fueron detenidos.
Los padres y el hermano de Mahsa Amini debían recibir el domingo en una ceremonia en Francia el premio Sájarov concedido a título póstumo a la joven. Sin embargo, las autoridades iraníes les impidieron viajar, afirmó su abogada en Francia.
Narges Mohammadi es la quinta galardonada en los más de cien años de historia del Nobel de la Paz que recibe el premio estando privada de su libertad, después del alemán Carl von Ossietzky, la birmana Aung San Suu Kyi, el chino Liu Xiaobo y el bielorruso Ales Bialiatski. Los premios Nobel de las demás disciplinas (literatura, química, medicina, física y economía) también serán entregados el domingo, en Estocolmo.
Fuente: AFP.
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Tras nueve días en huelga de hambre guardiacárceles retomarán funciones
El Ministerio de Justicia logró desactivar este martes la huelga de hambre impulsada por los agentes penitenciarios hace nueve días en busca del cumplimiento de una serie de reivindicaciones. Al respecto, el titular de la mencionada cartera estatal Ángel Ramón Barchini mantuvo una reunión tripartita con los representantes de funcionarios sindicalizados y dirigentes de centrales sindicales nacionales.
“Los reclamos de los funcionarios penitenciarios son absolutamente legítimos, hemos hablado con el equipo económico sobre las necesidades que tiene este ministerio tan sensible. Desgraciadamente durante años ha estado abandonado, mal presupuestado, ejecutado sus recursos sin control y eso hizo que hoy tengamos un sistema frágil en el tema de la seguridad, de la reinserción”, dijo Barchini en una entrevista con el programa “Cuenta Final” emitido por la radio Universo 970 AM.
Entre los principales pedidos de los agentes figuran la necesidad de contar con una ley orgánica penitenciaria que está en espera hace más de 20 años y que con su implementación tendrían una profesionalización de la carrera y dejarán de regirse por las normas de la función pública; confirmación del seguro médico, la recontratación de funcionarios despedidos, la desprecarización laboral y la dotación de equipos de seguridad.
“Conversé con el presidente del Senado y de Diputados sobre la necesidad de tener una ley que regule el accenso, el sueldo, la seguridad laboral y de vida, el seguro médico, que puedan obtener los equipamientos, tecnología, uniformes, muchos aspectos que no eran considerados por el anterior gobierno y que han permitido que nosotros como Estado paraguayo tengamos una ausencia absoluta en el control de la cárceles y eso originó la corrupción, amedrentamientos y constantes amenazas contra nuestros funcionarios que responden muchas veces a los clanes que manejan las cárceles”, indicó.
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Participaron de la reunión, además del ministro Barchini, Enrique Arévalos y Antonio Cuenca, del Sindicato Nacional de Agentes Penitenciarios y Educativos del Paraguay (Sinapep); Vicente Ruíz Díaz, del Sindicato de Trabajadores de Centros Educativos y Penitenciarios (Sitracepen); Liz Báez, del Sindicato de Trabajadores y Empleados del Ministerio de Justicia (Sitemjt); Miguel Zayas y Ramón Ávalos, de la Central Nacional de Trabajadores (CNT); y María Pintos, de la Confederación de la Clase Trabajadora (CCT).
“La política de reinserción penitenciaria es fundamental para bajar el índice de criminalidad y violencia que se vive en las calles, todos estos flagelos que sentimos como sociedad, esto hace a la seguridad nacional del país, que se deben enfrentar con seriedad y una política de Estado proyectada con el tiempo. Con el apoyo del Congreso podemos ir a plantear la ley que se necesitan los funcionarios penitenciarios y solicitar las ampliaciones presupuestarias para los nuevos centros penitenciarios”, comentó.