El gobierno israelí afirmó el miércoles que no puede confirmar “por el momento” las informaciones de que combatientes de Hamás “asesinaron” a 40 bebés en un kibutz del sur del país. El martes, la cuenta oficial @Israel del gobierno en la red social X (antes conocida como Twitter) publicó un video de una conmocionada reportera del canal israelí i24NEWS sobre la devastación en el kibutz de Kfar Aza.
El video iba acompañado de la frase “40 bebés asesinados”. “Nadie podría esperar que esto fuera a ser así, los horrores que estoy escuchando de estos soldados”, dijo la reportera en otro video difundido en la página web del canal televisivo.
Las informaciones sobre “40 bebés asesinados” fueron masivamente compartidas en redes sociales desde el martes, usándose para condenar la ofensiva de la milicia islamista Hamás contra Israel, que comenzó el sábado desde la Franja de Gaza. “No podemos confirmar ningún número por el momento”, indicó sin embargo este miércoles un portavoz del Ministerio israelí de Relaciones Exteriores, que gestiona la cuenta @Israel, al ser interrogado sobre esa versión.
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El general israelí retirado Itai Veruv dijo que “70 terroristas totalmente armados y entrenados” atacaron Kfar Aza sobre las 6:30 (3:30 GMT) el sábado. Describió el ataque como “una masacre, un gran desastre”. Unas 400 personas vivían en esta granja colectiva, que se encuentra a unos dos kilómetros de la frontera con la Franja de Gaza.
Varios militares israelíes desplegados en el lugar indicaron a AFP que entre 100 y 150 personas murieron en el ataque de Hamás al kibutz, entre ellas un número indeterminado de niños. Un soldado, que pidió el anonimato, describió mutilaciones, incluidas algunas decapitaciones, pero se negó a dar mayores precisiones.
Liberan a una rehén israelí
El movimiento islamista palestino Hamás afirmó este miércoles que había liberado a una rehén israelí y a sus dos hijos, capturados en la ofensiva lanzada el sábado contra Israel desde la Franja de Gaza. “Una colona israelí y sus dos hijos fueron liberados tras ser detenidos durante los enfrentamientos” entre el grupo palestino y el ejército israelí, indicó un comunicado del brazo armado de Hamás, que gobierna el enclave desde 2007.
El Ejército hebreo no confirmó esa información al ser consultado por la AFP. Un video difundido poco después por Al-Aqsa TV, el canal de Hamás, muestra a una mujer con camisa azul junto a dos niños y tres hombres armados alejándose de una zona de alambre de púas que parece ser la valla erigida por Israel alrededor de la Franja de Gaza.
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Pero la televisión pública israelí señaló posteriormente que las imágenes mostraron a personas que “nunca habían sido llevadas a Gaza”. La prensa local indicó que se trataba de Avital Aladjem, una residente del kibutz Holit que, según el relato que hizo en varias entrevistas, había sido llevada por la fuerza el sábado por hombres de Hamás junto a los dos hijos de un vecino a la zona fronteriza entre Israel y la Franja de Gaza tras el asalto del sábado en el sur del país.
Aladjem dijo que sus captores la dejaron libre para salir con los niños hasta la valla. Se cree que decenas de israelíes y extranjeros, entre ellos soldados, civiles, niños y mujeres, permanecen en manos de Hamás en la Franja de Gaza desde la ofensiva del sábado. Las autoridades israelíes han contabilizado 150 rehenes, mientras que cientos de personas siguen desaparecidas y sus cadáveres aún están siendo identificados. Hasta el momento no se ha producido ninguna liberación a nivel oficial.
Hospitales no dan abasto
En la Franja de Gaza, bombardeada por Israel tras una ofensiva del Hamas el sábado, el hospital Al Shifa está repleto de heridos. Familias enteras llegan unas tras otras y el personal está desbordado. “La situación es catastrófica”, alertan las autoridades locales. Akram Al Haddad, de 25 años, está junto a la cama de su sobrino de un año y medio, herido en un bombardeo israelí que mató a su hermano de cuatro años y a otras 16 personas.
El bebé sobrevivió con sus padres, heridos también en el ataque que destruyó la casa familiar en el sureste de Gaza, cuenta Akram. Pero “necesita una intervención quirúrgica urgente por su herida en la cabeza”, explica su médico. El problema es que “debe esperar a que una sala de operación esté disponible”.
“Trabajamos en circunstancias excepcionales (...) y debemos garantizar una alimentación eléctrica continua y la disponibilidad del material necesario antes de proceder a cualquier operación quirúrgica”, explica el médico que se ocupa de él, que pidió ser identificado únicamente por su nombre de pila, Abdallah.
Israel bombardea desde el sábado la Franja de Gaza, controlada por el Hamas desde 2007, en respuesta a una ofensiva de una magnitud sin precedentes del movimiento islamista palestino. En total y según un balance provisional, 765 personas murieron y 4.000 resultaron heridas de lado palestino, según las autoridades locales.
En ese hospital, “muchas” personas esperan su turno en la sala de urgencias. Pero “algunos mueren antes” de ser atendidos, se lamenta Abdallah. “Tratamos a muchos heridos, en su mayoría mujeres y niños que llegan al mismo tiempo”, dice a la AFP el médico urgentista Mohammad Ghoneim, interrumpido por la llegada de nuevos heridos: tres mujeres, dos niños, un hombre mayor y dos jóvenes.
“La capacidad limitada (del hospital) agrava el número de víctimas”, agrega. El médico lamenta la falta de suministros médicos que se añade a la falta de electricidad, agua y oxígeno. El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, anunció el lunes la imposición de un “bloqueo completo” en la Franja de la Gaza. “Ni electricidad, ni comida, ni agua”, dijo.
“No hay donde ir”
En su cama de hospital, Um Rama al Hassasna, está rodeada de sus cuatro hijos de tres a seis años. Todos resultaron heridos en un bombardeo israelí que cayó en una casa en el norte de Gaza. “Resulté herida, así como mis hijos. Nos trajeron aquí, esperamos ser atendidos”, relata la mujer. El ministerio de Salud en la Franja de Gaza advirtió que la falta de material médico llevará a una “situación catastrófica” en el enclave palestino en el que malviven 2,3 millones de personas.
Ocho hospitales “no son suficientes para responder a las necesidades de los ciudadanos”, aseguró. Los bombardeos israelíes dañaron el hospital Beit Hanoun, en el norte, así como el servicio de medicina neonatal del hospital Al Chifa. Salameh Maarouf, director de la oficina de prensa del gobierno dirigido por Hamas, lamenta que “teniendo en cuenta el gran número de heridos”, Gaza carece “de medicamentos, material médico, escáners y aparatos para radiografías.
El responsable acusa a “la ocupación (israelí) de crear deliberadamente una situación humanitaria miserable por medio de restricciones o agresiones”. Muchas familias que se quedaron sin vivienda han encontrado refugio en los corredores del hopital Al Chifa y en sus jardines. Luego de ser atendidos, varios no tienen donde ir. “Mi casa fue completamente destruida (...) Todas las casas fueron destruidas aquí”, dice Abu Ashour Sukayk, de 39 años. “Fue una noche sombría para mí, mi mujer y mis niños”.
Fuente: AFP.