Los rugbiers condenados por el crimen de Fernando Báez Sosa, ocurrido a la salida de una discoteca en 2020 en Villa Gesell, Argentina, salieron este martes por primera vez de la cárcel tras la sentencia de febrero pasado. Los mismos participan de una audiencia oral en la Sala II del Tribunal de Casación Penal en la ciudad de La Plata.

Según informaron medios del país vecinos, el abogado Hugo Tomei buscará revertir las penas de cinco de los ocho rugbiers (Máximo Thomsen, Enzo Comelli, Matías Benicelli y Luciano y Ciro Pertossi) condenados a prisión perpetua, mientras que solicitará la absolución para Blas Cinalli, Lucas Pertossi y Ayrton Viollaz, quienes fueron sentenciados a 15 años de cárcel.

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Los padres de la víctima, Graciela Sosa y Silvino Báez, representados por el abogado Fernando Burlando, apelaron el fallo y pidieron que los tres rugbiers condenados a 15 años de cárcel como partícipes secundarios del crimen del joven reciban prisión perpetua como el resto de los sentenciados. “Nuestra vida ya no es vida. No hay un día que pase sin pensar en mi hijo. Lloro todos los días. Es muy difícil el día a día”, dijo Graciela Sosa a su llegada a la sede judicial para la audiencia, acompañada de su marido.

El joven hijo de paraguayos perdió la vida el 18 de enero de 2020 tras ser atacado a puños y patadas por los ocho rugbiers que vacacionaban en el balneario de Villa Gesell. El suceso se dio tras la expulsión de una discoteca en la cual había comenzado una pelea.

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