Una familia argentina no encuentra consuelo ni explicación por el crimen de uno de sus miembros, de tan solo 14 años, a manos de su amigo de toda la vida, de 13 años de edad. Se trata de Joaquín Sperani, quien el jueves pasado faltó a su colegio, ubicado en la ciudad cordobesa de Laboulaye. Estuvo desaparecido hasta ayer, domingo, cuando fue hallado muerto con un golpe en la cabeza.
A tan solo 100 metros de la institución educativa donde asistía, en una vivienda abandonada, fue encontrado el cuerpo sin vida de Joaquín. Antes, se había realizado una marcha convocada por sus padres y vecinos, que terminó con una serie de rastrillajes por parte de la Policía, que confirmó el peor final para el adolescente.
Tras el hallazgo, la Policía apuntó el caso como un homicidio y consideró como supuesto autor a un amigo de Joaquín, también menor de edad. El adolescente fue detenido y en su poder se encontró el aparato celular de la víctima.
Lea más: Paraguayos detenidos en Argentina con droga anestésica oculta en cisternas
La Policía sospecha que el adolescente murió el mismo día de su desaparición y reveló que tiene consigo lo que sería el arma homicida, o al menos, un elemento compatible con la herida registrada en la víctima. Esperan los resultados de rigor correspondiente.
Inimputable
La causa de Joaquín pasará a un juzgado de menores, ya que al ser el supuesto autor del crimen un menor de edad, para la ley es “inimputable”. El exjuez de menores Alberto Crucella explicó a un medio argentino que en este caso hay “un abandono de la infancia” y “dos víctimas” al referirse al adolescente asesinado y al autor del crimen.
Para la legislación argentina, los jóvenes menores de 16 años “son inimputables”, incluso en este tipo de delitos violentos, con derivación fatal. Es por ello que este caso ha generado un creciente debate sobre la necesidad de correr la edad y modificar la normativa para que adolescentes que cometen crímenes de esta naturaleza puedan ser sometidos a un proceso penal y juzgados por sus actos.
Te puede interesar: Mercosur se reúne por primera vez desde 2019 con todos sus presidentes