Agentes del servicio penitenciario de Buenos Aires decomisaron el domingo pasado teléfonos celulares a Enzo Comelli y Blas Cinalli, dos de los rugbiers imputados por el crimen de Fernando Báez Sosa, indicaron medios argentinos. Tras la incautación de los dispositivos se descubrió que los procesados habrían estado administrando una cuenta de Instagram a favor de ellos mismos, en los que compartían mensajes como “basta de odio” y “basta de condena social”.

La cuenta de Instagram, bajo el usuario “rugbiers.zarate” y que contaba con más de 5.700 seguidores, ya no está disponible, pero los rugbiers habrían tenido una activa vida social desde prisión en que pedían “justicia por los nueve”, de acuerdo a varias capturas de pantalla que se hicieron de las historias que compartían, los ocho procesados se autopercibían como víctimas, junto al joven que asesinaron.

En una de las historias destacadas habían dejado el “buzón de preguntas” para sus seguidores, uno de ellos presuntamente les consulta: “Vos en el lugar del padre o madre de Fernando, ¿hubieses perdonado a los acusados?”, a lo que la cuenta de a favor de los rugbiers responde: “Hablando por mí, no podría vivir con tanto odio y rencor en mi corazón”.

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De acuerdo a otras historias y mensajes del mismo usuario, se puede ver cómo para ellos lo sucedido aquel 18 de enero del 2020, cuando Fernando Báez Sosa perdió la vida a causa de la brutal agresión que recibió por parte este mismo grupo, fue un solo un error donde todos fallaron, denotando que hasta el momento no asumen la responsabilidad o culpabilidad por el hecho.

“Nueve chicos perdieron su vida, nueve familias se destrozaron, todo por una maldita noche en la cual todo falló; el alcohol, los excesos, el mirar para otro lado, el no meterse a intervenir, el grabar la pelea con palabras violentas y de risa, el no llamar a las autoridades policiales, el no tener autoridades policiales y ambulancias en la puerta del boliche como corresponde, todo falló, todos fallamos, es muy triste”, dice una de las historias que se compartió desde el mencionado usuario.

Este jueves 26 de enero, desde el mediodía, prosigue el juicio con la presentación de alegatos por parte de la defensa de los rugbiers, representada por el abogado Hugo Tomei. Todo indica que tras culminar esta exposición, Graciela Sosa, madre de Fernando Báez Sosa, tendría la oportunidad de hablar ante el tribunal.

La etapa de presentación de alegatos se inició ayer miércoles y duró diez horas, en la que la Fiscalía fue contundente al solicitar la prisión perpetua para los ocho procesados, esto por haber cometido el hecho punible de “homicidio doblemente agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas en concurso ideal con lesiones”.

De acuerdo a lo expresado por los fiscales Gustavo García y Juan Manuel Dávila, los rugbiers tuvieron clara intención de matar a Fernando, en el hecho, todos tuvieron participación y lo atacaron “por sorpresa” y “a traición”. Además descartaron que haya sido un homicidio en riña, dado que los amigos de Fernando, ni sus amigos, tuvieron posibilidad de defenderse.

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