El asesino en serie francés Charles Sobhraj, conocido como “La serpiente” y responsable de múltiples homicidios en la década de 1970 en Asia, llegó a Francia este sábado tras pasar dos décadas en la cárcel en Nepal. Sobhraj, de 78 años, llegó al aeropuerto de Roissy Charles-de-Gaulle, en las afueras de París, a bordo de un avión procedente de Doha (Qatar), constató un periodista de la AFP que viajaba con él.
Un alto tribunal de Nepal determinó el miércoles que debía ser liberado por motivos de salud y deportado a Francia en un plazo de 15 días. Fue liberado el viernes y subido a un vuelo en el aeropuerto de Katmandú para llevarlo a París, con escala en Doha. Durante el vuelo, Sobhraj insistió ante el periodista de la AFP que era “inocente”.
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“Me siento genial... Tengo mucho que hacer. Tengo que demandar a mucha gente. Incluido el Estado de Nepal”, dijo Sobhraj a la AFP a bordo del avión. Consultado si pensaba que se le había calificado erróneamente como asesino en serie, el hombre respondió: “sí, sí”. A su llegada al aeropuerto francés, la policía de fronteras realizó las “verificaciones de identidad”, y abandonó discretamente el aeropuerto, según una fuente aeroportuaria, haciendo caso omiso de los numerosos periodistas que lo esperaban. Según esa fuente, en Francia no es “ni buscado ni perseguido”.
“Estoy muy contenta”, comentó ante la prensa su abogada francesa, Isabelle Coutant-Peyre, quien llegó a recogerlo al aeropuerto. “Fue condenado injustamente en un expediente fabricado con documentos falsificados por la policía nepalesa. Es un escándalo, lo presentan como un asesino en serie, lo cual es completamente falso”, agregó.
“Asesino del bikini”
La historia de Sobhraj fue relatada en la serie “La serpiente”, una producción de Netflix y la BBC. Nacido en Saigón, de padre indio y madre vietnamita, la cual se casó luego con un francés, Sobhraj emprendió una vida internacional de criminalidad que lo llevó en 1975 a Tailandia.
Haciéndose pasar como comerciante de joyas, se hacía amigo de las víctimas, muchos de ellos mochileros occidentales a quienes drogaba, robaba y mataba. De apariencia dócil y sofisticado, se le implicó en el asesinato de una joven estadounidense cuyo cuerpo en bikini fue hallado en una playa en 1975.
Apodado el “asesino del bikini”, Sobhraj llegó a estar vinculado a más de 20 asesinatos. Fue arrestado en India en 1976 y allí pasó 21 años encarcelado, salvo por un breve periodo en 1986 cuando escapó y fue capturado nuevamente en el estado costero de Goa. Liberado en 1997, vivió en París donde cobraba por dar entrevistas, pero regresó a Nepal en 2003.
“Fue el karma”
Fue localizado en un casino en el distrito turístico de Katmandú por el periodista Joseph Nathan, uno de los fundadores del diario Himalayan Times, y luego detenido. “Parecía inofensivo (...) Fue pura suerte que lo reconociera”, contó Nathan el jueves a la AFP. “Creo que fue el karma”. Un tribunal de Nepal lo sentenció a cadena perpetua por el asesinato de la turista estadounidense Connie Jo Bronzich en 1975 en ese país asiático. Una década después fue declarado culpable del asesinato del compañero de Bronzich, un canadiense.
En el avión que lo llevó a Doha, Sobhraj reiteró a la AFP su inocencia en los dos asesinatos en Nepal. “Las cortes de Nepal, de la corte de distrito al alto tribunal y la suprema corte, todos los jueces tenían prejuicios contra Charles Sobhraj”, afirmó. “Soy inocente de esos casos, ¿ok? No tengo que sentirme mal por eso, ni bien. Soy inocente, todo se basó en documentos falsos”, agregó.
El oficial policial tailandés Sompol Suthimai, cuyo trabajo con Interpol fue clave en su arresto en 1976, presionó para que Sobhraj fuera extraditado a Tailandia para ser juzgado allí por los asesinatos en ese país. Pero Sompol dijo el jueves a la AFP que no se opone a su liberación porque tanto él como el criminal al que una vez persiguió están ahora muy viejos. “No tengo sentimientos por él después de tanto tiempo que ha pasado”, declaró Sompol, de 90 años. “Creo que ya pagó por sus actos”, consideró.
Perfil del asesino en Asia
El famoso estafador y asesino en serie francés Charles Sobhraj, que inspiró la popular serie “La Serpiente” de Netflix, es responsable de varios crímenes cometidos en Asia en los años 1970. El carismático timador, de 78 años, ha pasado dos décadas encarcelado en Nepal por el asesinato de dos turistas en los años 1970. El viernes fue liberado de prisión debido a problemas de salud y debía ser trasladado a Francia ese mismo día.
Tras pasar una infancia difícil y varias estancias en prisión en Francia, por delitos menores, empezó a viajar a principios de los setenta, haciéndose amigo de mochileros, a los que acababa robando, a largo del conocido como “sendero hippie”, una ruta que iba de Europa al sureste asiático.
En un momento dado, llegó a Tailandia, donde estuvo implicado en su primer asesinato, el de una joven estadounidense cuyo cuerpo fue encontrado en una playa de Pattaya en 1975. “Era culto, cortés”, afirmó Nadine Gires, que se hizo amiga de Sobhraj cuando este se mudó a su edificio de apartamentos, en Bangkok, en 1975.
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Pero la mujer no tardó en desconfiar de su parlanchín vecino, que se hacía pasar por un comerciante de piedras preciosas para atraer a los viajeros --que solían moverse con mucho dinero en metálico-- para drogarlos, robarles y matarlos. “Mucha gente enfermaba en su casa”, explicó Gires a la AFP el año pasado. “Él no solo era un estafador, un seductor, un ladrón de turistas, sino un diabólico asesino”. Sobhraj, un ciudadano francés, políglota, de madre vietnamita y padre indio, ha estado vinculado a más de 20 homicidios.
Sus víctimas eran estranguladas, apaleadas o quemadas, y Sobhraj solía servirse de los pasaportes de los hombres a los que mataba para viajar hasta su próximo destino. Fue apodado “La serpiente” por su habilidad para hacerse pasar por otros y así evadir a la justicia. Ese mote dio nombre a una serie de televisión producida por la BBC y Netflix, inspirada en su vida, que ha tenido millones de espectadores en todo el mundo.
Despreciaba a los mochileros
Las autoridades lo atraparon en India en 1976, donde fue sentenciado a 12 años de cárcel. Desde su celda, Sobhraj le vendió su historia a una editorial y fue entrevistado por la periodista australiana Julie Clarke, a la que relató sus asesinatos con todo lujo de detalles. “Despreciaba a los mochileros, los veía como jóvenes pobres, drogadictos”, explicó la reportera a la AFP en 2021. “Se consideraba a sí mismo un héroe criminal”, afirmó.
Sobhraj pasó 21 años en prisión, salvo por un periodo de 22 días, en 1986, cuando logró escapar de su celda dándoles a sus guardias galletas, pasteles y uvas mezcladas con somníferos. Lo atraparon en un restaurante en el costero estado de Goa. Más tarde, dijo que se había fugado para que le aumentaran la pena en India y evitar que lo extraditaran a Tailandia, donde hubiera podido ser condenado a pena de muerte.
A su salida de prisión, Sobhraj regresó a París, donde llevaba una vida tranquila. En 2003 fue visto de nuevo en Nepal, en un turístico barrio de Katmandú, y días después fue detenido en un casino. Un tribunal lo condenó a cadena perpetua al año siguiente por el asesinato de la turista estadounidense Connie Jo Bronzich en 1975.
Unos diez años después, la justicia nepalí lo condenó por el asesinato del compañero de viaje de Bronzich, el canadiense Laurent Carriere, cuyo pasaporte utilizó Sobhraj para salir de Nepal tras cometer sus crímenes. En 2008 se casó con Nihita Biswas, 44 años menor que él e hija de su abogada nepalí, en una ceremonia secreta, en prisión. Sobhraj tiene al menos una hija, fruto de una anterior relación, residente en Francia.
Fuente: AFP.