El Fondo Monetario Internacional entregó este viernes un salvavidas financiero al presidente Javier Milei con un préstamo de 20.000 millones de dólares para Argentina, cuyo gobierno eliminó “para siempre” el control de cambios que regía en el país desde 2019.
La lluvia de fondos para sostener el programa económico del presidente ultraliberal incluye además ayudas de 12.000 millones del Banco Mundial y de 10.000 millones del Banco Interamericano de Desarrollo, informaron ambas organizaciones paralelamente al anuncio del FMI.
El crédito del FMI es “un voto de confianza en la determinación del gobierno” de Milei para “avanzar en las reformas”, afirmó la directora del organismo multilateral, Kristalina Georgieva. Estos fondos darán a Argentina, que padece históricamente problemas de liquidez, un mayor poder financiero para apuntalar su moneda y representa un impulso para el presidente.
El FMI anunció este viernes en un comunicado que el nuevo programa para Argentina prevé “un ancla fiscal fuerte, la transición a un régimen monetario y cambiario más sólido, con una mayor flexibilidad del tipo de cambio, y el avance de las reformas”. Milei emprendió desde su asunción en diciembre de 2023 una batería de medidas para reducir el gasto público, con las que obtuvo el primer superávit anual en 14 años y domó la inflación de 211% en 2023 a 118% en 2024.
Los nuevos fondos, que se suman a 44.000 millones de dólares otorgados por el FMI en 2018, son un reconocimiento a “los impresionantes avances en la estabilización de la economía” del país sudamericano, añadió Georgieva en la red social X.
En un discurso en cadena nacional Milei dijo que es la primera vez que el país tiene “orden fiscal, orden monetario y orden cambiario a la vez” y que “la economía real de los argentinos mejorará en el marco de dicha estabilidad y crecerá como nunca antes”.
“Desde este momento, eliminamos el cepo cambiario de la economía argentina para siempre”, dijo Milei, refiriéndose al complejo control de cambios que regía en Argentina desde 2019 para contener la fuga de capitales y cuya eliminación era necesaria para la liberación de los fondos.
Desde el lunes, el dólar “podrá fluctuar dentro de una banda móvil entre 1.000 y 1.400 pesos, cuyos límites se ampliarán a un ritmo del 1% mensual”, detalló el Banco Central en un comunicado. Este viernes, el dólar oficial se ubicaba en 1.097,50 pesos argentinos y el “blue” (informal) en 1.375 pesos.
Con esto se suprime el dólar diferencial para exportadores y “se eliminan las restricciones cambiarias a las personas humanas (no jurídicas), se permite la distribución de utilidades a accionistas del exterior a partir de los ejercicios financieros que comienzan en 2025 y se flexibilizan los plazos para el pago de operaciones de comercio exterior”, añadió el texto.
Juan Luis Bour, economista jefe de la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas, señaló que “la modificación del esquema cambiario se veía venir”, pero que era necesario disponer de los fondos. “La única forma de parar una corrida es tener una montaña de dólares” y teniendo en cuenta el tamaño de la economía argentina con el préstamo “han conseguido una montaña bastante importante”, dijo a la AFP.
El economista Hernán Letcher dijo a la AFP que “probablemente el mercado buscará un tipo de cambio más alto que el oficial” por lo que va a haber “un salto del tipo de cambio”, aunque aclaró que “no es una salida del cepo generalizada” ya que sigue habiendo limitaciones para los stocks de las empresas en el corto plazo.
Fuente: AFP