De visita en Londres por el funeral de la reina Isabel II, el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, cargó este sábado pasado contra el “aborto” en un mitin improvisado, que le valió las críticas de su rival en la elección presidencial Lula da Silva.
El mandatario populista llegó en la mañana a la capital británica, donde fue recibido por decenas de personas, algunas con banderas brasileñas, a las puertas de la residencia del embajador de Brasil, según los videos difundidos en las redes sociales.
“Estamos aquí, en una época, en un momento de pesar, con un profundo respeto por la familia de la reina y por el pueblo del Reino Unido”, dijo en sus primeras palabras desde el balcón de la residencia, al que salió saludando a la multitud y con los brazos en alto.
Pero a continuación el presidente y candidato a su reelección en octubre se embarcó en un mitin electoral, ya que, a su entender, la gente congregada allí “representa lo que realmente sucede en Brasil”, que tiene por delante decidir su “futuro”.
“Sabemos quién está al otro lado y qué quieren implantar en nuestro Brasil”, aseguró el conservador, de 65 años, para quien su país “no quiere discutir de la liberalización de las drogas, de legalizar el aborto” ni “tampoco acepta la ideología de género”.
“Nuestro lema es Dios, patria, familia y libertad. Y ese es el sentimiento de la gran mayoría del pueblo brasileño”, subrayó desde el balcón, donde ondeaba la bandera brasileña, generando aplausos de los asistentes. Su diatriba recibió las críticas del exmandatario izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva, su principal rival en la elección presidencial, quien criticó que hiciera el viaje “para hacer campaña” y “hablar mal de los demás”.
“En lugar de que Bolsonaro fuera al velatorio de la reina, hubiera sido más loable que hubiera visitado a familiares y huérfanos de víctimas del covid-19, que hubiera comprado las vacunas en el momento adecuado”, tuiteó el candidato del Partido de los Trabajadores.
Aunque el presidente defendió que “con la terrible pandemia (...) Brasil resistió”, su criticada gestión de la crisis sanitaria, que dejó más de 680.000 muertos en el país --el segundo más golpeado en cifras nominales--, estuvo en el punto de mira de las reacciones de los internautas.
“Bolsonaro va a Londres a hacer del cadáver de la reina Isabel una tribuna política. No es de extrañar. Los cadáveres son su especialidad. ¡La pandemia no miente!”, tuiteó el caricaturista político Carlos Latuff. A dos semanas de la primera vuelta, Lula mantiene 45% de las intenciones de voto frente a 33% de Bolsonaro, según una cuenta del Instituto Datafolha divulgada el jueves. Estas están consideradas como las elecciones más polarizadas en Brasil.
“Dolor” y “reconocimiento”
Jair Bolsonaro es uno de los pocos líderes de América Latina y el Caribe que confirmó su asistencia el lunes al funeral de Isabel II, que falleció el 8 de septiembre tras siete décadas en el trono, al que asistirán mandatarios de todo el mundo.
El domingo, el mandatario y su esposa Michelle Bolsonaro, ambos vestidos de riguroso negro, acudieron a la capilla ardiente de la soberana en Westminster Hall, por donde también pasaron el estadounidense Joe Biden o el francés Emmanuel Macron, y sus mujeres.
“En Brasil, todavía tenemos un fuerte recuerdo de su visita en 1968. Por todo lo que representó para su país y para el mundo, el momento es de dolor y de reconocimiento por todo lo que hizo por el mundo”, tuiteó Bolsonaro tras firmar el libro de condolencias en Lancaster House.
A continuación, la pareja presidencial participó en una recepción en el Palacio de Buckingham del nuevo rey Carlos III, la víspera del funeral de Estado que se celebrará en la Abadía de Westminster a partir de las 11:00 (10:00 GMT).
Según su programa oficial, el lunes por la tarde abandonará Londres rumbo a Nueva York, donde está previsto que pronuncie un discurso un día después ante la Asamblea General de la ONU. La primera vuelta de la elección presidencial tendrá lugar el 2 de octubre.
Fuente: AFP.