El gobierno de Gustavo Petro rechazó este martes la invasión de predios privados en Colombia por parte de indígenas y otros campesinos, ante la expectativa que generó su plan de reforma para distribuir la propiedad rural. “No aceptamos y rechazamos, y solicitamos a quienes hoy están de manera violenta (...) invadiendo predios privados a lo largo y ancho del país, para que se abstengan” de esta práctica, dijo la vicepresidenta, Francia Márquez, en conferencia de prensa.
Petro, el primer presidente de izquierda de Colombia, prevé llevar a cabo una “reforma agraria” para redistribuir la propiedad rural en el país de Latinoamérica donde más se concentra la tierra en pocas manos, según la ONG inglesa Oxfam.
El acceso a la tierra está en el corazón del conflicto armado que por casi seis décadas ha desangrado a Colombia. Surgidas en las décadas de los sesenta, al calor de la Guerra Fría, varios grupos formados en su mayoría por campesinos se levantaron en armas para exigir una redistribución de la propiedad agrícola.
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Los paramilitares de ultraderecha, enemigos acérrimos de los rebeldes, despojaron violentamente a miles de familias de sus tierras para venderlas luego a terratenientes o ganaderos. Ante la expectativa de una reforma agraria bajo el gobierno de Petro, indígenas han ocupado predios a la fuerza, principalmente en el departamento de Cauca, donde operan ingenios azucareros y uno de los más afectados por la violencia que siguió al acuerdo de paz con la otrora guerrilla de las FARC.
“Confirmamos que sí va a haber Reforma Agraria para buscar equidad en el acceso a la tierra, pero pedimos a los colombianos respetar la tenencia y la propiedad”, dijo la ministra de Agricultura, Cecilia López, en un comunicado leído en la misma rueda de prensa.
La funcionaria reiteró que el gobierno cederá a los “colombianos más vulnerables” las propiedades incautadas a los corruptos y a la mafia del narcotráfico. “Muchas de estas propiedades están en procesos de extinción de dominio y, también, se debe hacer un análisis para la entrega de estos predios a quienes más lo necesitan, dentro de nuestra política de equidad y democratización de la propiedad”, agregó López.
En el último mes ganaderos y sectores azucareros han enfrentado invasiones “casi a diario”, según denunciaron al diario El Tiempo. Solo este año han sido ocupadas más de 1.000 hectáreas, señaló el medio. De acuerdo con los datos más recientes de Oxfam, el 1% de las fincas de mayor tamaño tienen en su poder el 81% de la tierra en Colombia.
Petro, que cuenta con mayorías en el Congreso, aspira a que la reforma agraria permita potenciar la producción de alimentos, y de paso cumplir con uno de los compromisos asumidos con la guerrilla de las FARC en el marco del acuerdo de paz de 2016.
Fuente: AFP.