La Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, criticó duramente este jueves al presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, por agitar el fantasma del fraude electoral, atacar al poder judicial y no respetar la democracia.
“Estoy seriamente preocupada por los informes sobre un aumento de la violencia política, el mantenimiento del racismo estructural y la reducción del espacio cívico”, explicó Bachelet en su última rueda de prensa antes de dejar su cargo el próximo 31 de agosto.
La Alta Comisionada ha cargado contra el presidente brasileño, asegurando que intensificó sus ataques contra el poder judicial, así como contra el sistema electoral, “incluso en reuniones con embajadores” y representantes de las delegaciones diplomáticas extranjeras.
Bachelet recordó así la reunión que tuvo lugar en el Palacio de la Alvorada a iniciativa del propio Bolsonaro, quien pretendía hacer llegar a los representantes diplomáticos sus dudas acerca de la fiabilidad del sistema electoral brasileño, así como sus teorías infundadas de posible fraude.
“Lo más preocupante es que convocó a sus simpatizantes a manifestarse contra las instituciones del poder judicial el 7 de septiembre”, recordó con respecto a su llamamiento a manifestarse en Brasilia con motivo del día de la independencia en 2021, agregando que “un jefe de Estado debe respetar los demás poderes”.
Bachelet precisó que “no se pueden hacer cosas que aumenten la violencia y el odio contra las instituciones democráticas”, al tiempo que calificar como “preocupantes” los ataques contra ciudadanos afrobrasileños, personas del colectivo LGTB y mujeres, como ya hizo el pasado mes de junio.
La Alta Comisionada también se referió al incidente en el que un simpatizante del presidente brasileño irrumpió a tiros en la fiesta de cumpleaños de otro simpatizante del Partido de los Trabajadores (PT) y lo mató a tiros. “No es que hayan ocurrido miles de casos. Pero estos casos no deberían ocurrir”, señaló.
No es la primera vez que Bachelet critica a Bolsonaro. En junio, la Alta Comisionada comentó los ataques contra legisladores brasileños y candidatos negros, mujeres y personas LGTBI a las elecciones generales de Brasil.
“Hago un llamamiento a las autoridades para que garanticen el respeto de los derechos fundamentales y las instituciones independientes”, expresó en aquel momento la expresidenta de Chile, pidiendo que los comicios en el país, previstos para el 2 de octubre, sean justos y transparentes.
El mandatario brasileño, por su parte, acusó a la Alta Comisionada en 2019 de “entrometerse” en los asuntos internos del país” por unas declaraciones que realizó sobre los incendios en la Amazonía desde Ginebra durante una rueda de prensa en la que analizó su primer año en el cargo.
Fuente: Europa Press.