“El Gobierno bonificará a los transportistas con 20 céntimos de euro por litro o kilo de combustible”, anunció en un comunicado el ministerio de Transportes esta madrugada tras más de 12 horas de reunión con la organización patronal Comité Nacional del Transporte por Carretera (CNTC), que reúne a las asociaciones mayoritarias en el sector.
El gobierno costeará 15 céntimos de la subvención y las compañías petroleras los cinco restantes. Además, el gobierno “dará una ayuda directa al sector de 450 millones” de euros (496 millones de dólares), añadió el ministerio, que consistirá en un pago único de 1.250 euros por camión, 900 por autobús, 500 por furgoneta y 300 por vehículo ligero (taxis, VTC y ambulancias).
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Este paquete de medidas “supondrán una inyección de más de 1.000 millones de euros” al sector, añadió el comunicado. Iniciada el 14 de marzo en un contexto de altos precios de la energía, esta huelga de los transportistas, que algunos comparan al movimiento de los “chalecos amarillos” en Francia, ha cobrado amplitud en los últimos días, con la multiplicación de bloqueos de carreteras y ataques a quienes no la secundan.
Muchas empresas han tenido que parar la actividad de sus fábricas por falta de suministros o de camiones para distribuir su producción, o amenazan con hacerlo pronto, como Danone, Heineken, Mercedes o Arcelor Mittal, y en algunos supermercados empiezan a faltar productos.
“Migajas”
Manuel Fernández, portavoz de la Plataforma para la Defensa del Sector del Transporte de Mercancías por Carretera, una organización minoritaria que reúne a pequeños transportistas y protagoniza la huelga, avanzó que no aceptan el acuerdo.
Sin embargo, horas más tarde, la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, aceptó una de las demandas de la plataforma, la de reunirse con ellos, este viernes por la tarde, confirmó su ministerio a la AFP, algo a lo que se había resistido hasta ahora al no considerarlos representativos.
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En declaraciones a la radio pública RNE, Fernández tildó la subvención al gasóleo de “migajas y propinas” y precisó que su problema principal es lo poco que les pagan los grandes empresarios del transporte que les subcontratan.
“Tendría que bajar el gasoil más de 60 céntimos para que fuera suficiente y poder trabajar a los precios de ruina que nos tienen impuestos”, añadió. “No se puede pagar por debajo de los costes de explotación a quien realiza el servicio, ese el problema que hay que acotar”, sentenció.
Manifestaciones en Madrid y Barcelona
El gobierno aprobará las ayudas en su reunión semanal del martes vía un decreto ley. Este viernes, el precio medio del gasóleo en España oscilaba entre los 1,4 y los 1,8 euros el litro, según el tipo, de acuerdo al portal dieselogasolina.com. La inflación en España llegó a 7,6% en febrero sobre un año, propulsada principalmente por el aumento de los productos energéticos (+44,3% en un año) y de los carburantes y combustibles (+26,9%).
Miles de transportistas llevaron a cabo la manifestación que tenían prevista este viernes ante el ministerio de Transportes en Madrid, vestidos con los chalecos amarillos reflectantes de señalización. También había movilizaciones en Barcelona. “Trabajamos a pérdidas”, lamentó José Luis, un transportista de Toledo (centro) que asistía a la manifestación de Madrid, mientras que Javier Prada, un camionero andaluz, insistió en que la huelga seguirá “hasta que nos reciban”.
Fuente: AFP.