El Banco Central de Brasil (BCB) se dispone a subir nuevamente el miércoles su tasa de interés de referencia en un punto porcentual, hasta 11,75%, según previsiones del mercado, ante una inflación que no cede y agravada por la guerra en Ucrania.
Será la novena alza consecutiva de la tasa Selic desde el inicio del ciclo de ajuste monetario hace exactamente un año, cuando el BCB dejó atrás el nivel histórico del 2% mantenido durante algunos meses para dar impulso a la economía castigada por la pandemia. La decisión será anunciada al final de una nueva reunión del Comité de Política Monetaria (Copom) del BCB, que inicia este martes.
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El movimiento de un punto porcentual había sido anticipado por el Comité en el encuentro de febrero y está en línea con lo esperado por el mercado, según una consulta del diario Valor Económico entre casi un centenar de consultoras e instituciones financieras. La tasa Selic se ubicó desde el mes pasado sobre los dos dígitos por primera vez en cinco años y alcanzó un nivel solo superado por el 11,25% del segundo trimestre de 2017.
Sin embargo, las autoridades monetarias previeron para la presente reunión una “reducción del ritmo de ajuste” en la tasa básica, pese a una “persistencia inflacionaria”, luego de aplicar tres saltos de 1,5 puntos porcentuales desde octubre. La situación económica empeoró tras la invasión de Rusia a Ucrania el 24 de febrero.
Cambio de escenario
Si bien mantuvo el consenso sobre la subida de este miércoles, el mercado elevó en pocos días sus expectativas para este año de 12,25% hasta 12,75% para la Selic, según la última encuesta Focus del BCB, que mostró una multiplicación de las estimaciones por encima del 13%.
“El escenario empeoró para la política monetaria desde la reunión anterior, con mayor inflación y un nivel más alto para la Selic, como consecuencia del conflicto militar, principalmente por la suba de los precios de las materias primas, que no fue compensada por la apreciación del real”, analiza Mauricio Oreng, superintendente de Estudios Macroeconómicos del Banco Santander Brasil.
La cotización del dólar cayó a mínimos en meses, hasta unos 5 reales, debido al movimiento de capitales extranjeros a mercados emergentes, particularmente atraídos por tasas altas de interés. Pero la inflación continuó en alza y avanzó 1,01% en febrero, la mayor para ese mes desde 2015, acumulando 10,54% en 12 meses.
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El panorama empeoró la semana pasada, cuando el conflicto en Ucrania se hizo palpable para los consumidores locales con un fuerte incremento en los combustibles, en respuesta a la subida internacional del precio del petróleo. La última proyección del mercado para los precios minoristas en 2022 se ubicó en 6,45%, frente a 5,65% una semana atrás, alejándose del techo del 5% de la meta del BCB.
Oreng sostiene que ante el cambio de escenario el ciclo de ajuste monetario podría extenderse más de lo previsto. Así, el Copom vuelve a enfrentar el desafío de contener la inflación y mantener el crecimiento. La mayor economía de América Latina superó en el último trimestre una breve recesión y cerró 2021 con una expansión de 4,6%. Ahora, las previsiones son de un PIB en crecimiento de 0,49% para 2022.
Fuente: AFP.