Con la ayuda de un helicóptero, una fragata, seis remolcadores y un buque de extinción de incendios, los buzos y los bomberos seguían rastreando la zona de la catástrofe, con la esperanza de encontrar a los doce camioneros desaparecidos desde hace 24 horas en el incendio de un ferri de la compañía italiana Grimaldi, situado a 50 kilómetros de las costas de la isla de Corfú.

Pero el incendio, avivado por el viento, las explosiones esporádicas y la temperatura de más de 500 grados, estaba impidiendo las labores de rescate a bordo del barco, según los bomberos y los guardacostas griegos.

El transbordador de la compañía italiana Grimaldi, con destino a Brindisi (Italia), se incendió en la madrugada del viernes, dos horas después de salir del puerto griego de Igumenitsa, con 290 personas registradas a bordo, entre ellas 51 miembros de la tripulación.

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Junto a las 278 personas rescatadas, también fueron salvados dos migrantes ilegales afganos, lo que hace temer que pueda haber otros pasajeros no registrados. Es frecuente que haya migrantes clandestinos en los transbordadores que van de Grecia a Italia.

El servicio de accidentes marítimos de Grecia empezó una investigación. El incendio podría haberse iniciado en un camión aparcado en la bodega. El capitán del ferri y dos mecánicos estaban siendo interrogados por la fiscalía el sábado, indicó la cadena de televisión estatal ERT.

El puerto de la isla griega de Corfú estaba tranquilo el sábado, indicaron periodistas de AFP en el lugar. Las 280 personas rescatadas la víspera pasaron la noche en un hotel o en un hospital, con heridas leves o dificultades respiratorias. Decenas de socorristas, buzos y bomberos seguían luchando contra las llamas y el espeso humo que sale del “Euroferry Olympia”, cerca del islote de Erikusa, entre Grecia y Albania.

El barco será remolcado a un “lugar seguro” para bombear el combustible y el agua y evitar la contaminación marina, dijo el sábado el ministro griego de Marina Mercante, Giannis Plakiotakis, a Skai TV. “Algunos de nuestros amigos siguen desaparecidos, no sabemos dónde están”, dijo un superviviente turco, Fahri Ozgen, ahora refugiado en un hotel de Corfú.

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También contó a la AFP cómo la víspera, en la cubierta del barco, unas “250 personas gritaban, vociferaban y algunas se lanzaron al mar” para escapar del fuego que sentían “bajo sus pies”. Los desaparecidos son siete búlgaros, tres griegos, un lituano y un turco, informaron los guardacostas griegos a la AFP. Sus familias llegaron a Corfú el sábado, donde les asistió un psicólogo.

Los supervivientes se quedaron sin nada en Corfú. “Hemos perdido nuestro dinero, nuestros pasaportes, todos nuestros documentos administrativos, ya no tengo ni siquiera zapatos en los pies”, se lamentó Ali Duran, un camionero turco, a la AFP.

El viernes, dos pasajeros atrapados en la bodega del vehículo fueron evacuados tras más de diez horas en la espesa humareda y luego fueron hospitalizados, según los guardacostas. Uno de ellos, un búlgaro tiene “una saturación de oxígeno muy baja y ha sido intubado”, dijo la viceministra de Exteriores búlgara, Velislava Petrova, en una rueda de prensa el sábado.

El equipo especializado que había podido embarcar en el ferri el viernes no pudo quedarse a causa de las llamas y el calor. Varios camioneros dijeron a la televisión griega ERT el sábado que preferían dormir en sus camiones antes que en los abarrotados camarotes de los transbordadores.

Según el diario Kathimerini, el sindicato de camioneros griegos ya denunció en junio de 2017 el mal funcionamiento del aire acondicionado en los camarotes del “Euroferry Olympia” y el “Euroferry Egnazia”, dos barcos de la compañía Grimaldi. El ferri, puesto en servicio en 1995, fue sometido a una visita de control que “dio un resultado positivo” el 16 de febrero en Igumenitsa, informó el grupo Grimaldi en un comunicado.

Fuente: AFP.