Este pasado domingo confirmaron que diez personas que viajaban en una lancha murieron tras el derrumbe de un despeñadero en el lago Furnas, una región turística de Minas Gerais. Según los socorristas, las víctimas, todas brasileñas, eran parte de un mismo grupo de familiares y amigos que estaban en la embarcación más afectada.
Las causas del derrumbe todavía serán determinadas, pero las intensas lluvias que han caído los últimos días en el sudeste de Brasil, y en especial en el estado de Minas Gerais, favorecieron el desprendimiento, apuntan los bomberos y especialistas.
Lea más: Temblor de escasa profundidad en China deja 22 personas heridas
Este lunes, las autoridades brasileñas pidieron a la población de la ciudad de Pará que abandone la zona en la que se encuentra una represa debido al riesgo de rotura a causa de las fuertes lluvias. “Recomendamos a todos los vecinos que se encuentran cerca de la fábrica Carioca que salgan inmediatamente de sus casas debido al alto riesgo de rotura de la represa”, advirtió el municipio en un comunicado en redes sociales.
En todo el estado hay más de 135 urbes en situación de emergencia debido al temporal, que ya provocó 25 muertos y 92 mil desplazados; mientras que el peligro de la represa podría afectar a tres ciudades. Minas Gerais registró un antecedente catastrófico en 2019, cuando el dique en Brumadinho dejó 270 muertos.
“Vino a festejar su cumpleaños”
El sábado al mediodía, un gran fragmento rocoso se desprendió de un barranco y cayó, perpendicular, encima de cuatro lanchas que paseaban por el lago, en una región de barrancos y cascadas del municipio de Capitolio. Más de 30 personas resultaron heridas, nueve de las cuales debieron ser hospitalizadas.
En dramáticos videos compartidos en las redes sociales se puede ver el momento exacto en que el macizo se desprende y cae sobre las embarcaciones, ante el pánico de quienes presencian la escena desde las otras lanchas.
“Había una embarcación, de nombre Jesús, que tenía diez integrantes. Esos diez integrantes hasta ahora no aparecen y fueron surgiendo cuerpos y fragmentos de cuerpos”, dijo Marcos de Souza Pimenta, comisario de la Policía Civil, antes de que la operación de rescate de los bomberos confirmara los diez fallecidos.
Lea más: Los 100 mejores videojuegos de la historia
El día fue de tristeza para familiares y amigos de las víctimas, que debieron ir a la ciudad de Passos a reconocer los cuerpos. “Vino a festejar su cumpleaños aquí, incluso sería hoy, cumpliría 25 años y ocurrió esa fatalidad, estamos esperando la llegada del cuerpo”, dijo Ramilton Rodrigues da Mota, amigo de Michael Douglas, una de las víctimas.
Las víctimas eran de nacionalidad brasileña y tenían entre 14 y 68 años, según las investigaciones preliminares. Uno de esos registros muestra el minuto previo al derrumbe, en el que varias personas advierten que “están cayendo muchas piedras” y piden a gritos a los ocupantes de las otras lanchas que se alejen del paredón.
Erosión natural y lluvias
La región de Capitolio, a 300 km de la capital Belo Horizonte, atrae a numerosos turistas brasileños con sus paredones de rocas y cascadas que rodean las verdes aguas del lago Furnas, formado por la represa hidroeléctrica con el mismo nombre.
“La naturaleza peculiar de ese lugar, todo el atractivo turístico que proporciona el paisaje, con el embalse que forma el lago, las cascadas y saltos de agua, es creada por la erosión del relieve, un proceso natural y constante”, explicó a la AFP el geógrafo Eduardo Bulhoes, de la Universidad Federal Fluminense (UFF).
A esa erosión natural se suman las lluvias intensas, que tornan más probables los desprendimientos como el ocurrido el sábado, llamados “movimientos de masa”, afirmó Bulhoes. “Diciembre y enero son los meses con más lluvia en Capitolio y consecuentemente los meses con mayor potencial de movimientos de masa”. Para evitar nuevos accidentes, sería recomendable “limitar el área recreativa y alejar los paseos de los paredones y saltos de agua” en la temporada de mayor riesgo, concluyó el especialista.
Con información de AFP.