Una historia de horror en su máxima expresión tuvo como protagonista a una joven veinteañera, que conoció a una persona a través de una red social de citas, se ilusionó y terminó de la peor manera. Se trata de Sydney Loofe, cuyo asesinato conmocionó a Estados Unidos y al mundo entero en noviembre del 2017. Ahora, 4 años después, su caso vuelve a sonar tras la sentencia a sus asesinos, hace solo unas semanas.
Sydney se preparó para asistir a una cita, publicó una foto en sus redes anunciándolo y jamás volvió a su casa. Sus familiares denunciaron su desaparición y finalmente la encontraron muerta, desmembrada en 14 pedazos distribuidos en bolsas arrojadas por la ciudad estadounidense de Nebraska, el 4 de diciembre del 2017.
Los responsables, según la Justicia de ese país, son una joven veinteañera, Bailey Boswell, quien era la cita de Sydney, y su pareja, un hombre de más de 50 años, Aubrey Trail.
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Según la investigación, ambos se dedicaban a estafar a anticuarios y practicaban el sexo grupal, en algunos casos, obligando y chantajeando a mujeres que conocían a través de la aplicación de citas.
Así fue como cayó Sydney, cuyo asesinato fue premeditado por la pareja, esto conforme la pesquisa, ya que ambos condenados compraron horas antes las herramientas para llevar a cabo el crimen y el posterior desmembramiento de la joven.
Durante el juicio, tanto Bailey como Aubrey mintieron y lo confirmaron incluso ante sus abogados. El hombre llegó a señalar que era un vampiro y que podía leer la mente. Finalmente, ambos fueron declarados culpables; Aubrey fue sentenciado a la pena de muerte y Bailey a cadena perpetua sin libertad condicional. Sus abogados anunciaron que apelarán el fallo.
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