El gobierno de Israel se anticipó al resto de los países y a fines de diciembre del año pasado inició una intensa campaña de vacunación masiva con la primera dosis de la vacuna Pfizer contra el COVID-19.

Poco más de tres meses después de que el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, haya sido el primer inoculado de manera oficial, el país avanza hacia una normalización de la situación, aunque aún sigue cerrado al turismo internacional.

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El Ministerio de Salud anunció que el martes fueron realizadas más de 42 mil pruebas, de las cuales 356 dieron positivo, por lo que tasa de contagio cayó a 0,9%.

Casos activos

Actualmente existen cerca de 8.000 casos activos en el país (36.431 en Paraguay), entre ellos 638 personas internadas (206 conectadas a respiradores artificiales y 226 en estado crítico). Israel registra un total de 6.188 fallecidos desde el inicio de la pandemia y se estima que 5.229.000 israelíes ya han recibido al menos la primera dosis de la vacuna y aproximadamente 4.750.000, la segunda.

Pasaporte verde

Las autoridades israelíes han implementado el llamado pasaporte verde, que se otorga a aquellas personas adultas que ya han superado el tiempo de una semana luego de recibir la segunda dosis de la vacuna contra el COVID-19.

También se aplica el pasaporte verde a aquellos que se han recuperado del virus y que actualmente no son elegibles para ser vacunados. La tenencia del pasaporte verde permite a las personas asistir a lugares públicos o turísticos o espectáculos masivos, que ya comenzaron a ser habilitados para un cierto número de asistentes. La idea del pasaporte verde es que el uso de este sistema pueda permitir volver a abrir de manera segura después de los cierres lo antes posible.

Trabajadores palestinos inmunizados

Actualmente todas las personas que ingresen al país por vía aérea son vacunadas y permanecen en aislamiento por algunos días. También alrededor de 160 mil trabajadores palestinos que ingresan diariamente desde Cisjordania y Gaza fueron vacunados por las autoridades sanitarias.

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La campaña de vacunación espera tener a toda la población del país, de aproximadamente nueve millones de habitantes, totalmente inmunizada con las dos dosis de la vacuna Pfizer a finales de abril o principios de mayo.

Inmigrantes ilegales beneficiados

Los inmigrantes ilegales también fueron beneficiados con esta campaña de vacunación, apoyada por las autoridades del Ministerio de Migración, que de manera “descuidada” anuncia permanente en sus redes sociales los lugares y días en donde sus funcionarios no realizarán ninguna búsqueda, lo que es aprovechado por los sistemas de salud para inmunizar a estas personas de manera gratuita.

Israel también ha hecho llegar una gran cantidad de vacunas Pfizer y Moderna a países con los que mantiene una estrecha cooperación, como Honduras, Guatemala o República Checa, y ha entregado 5.000 dosis a las autoridades palestinas.

La principal lucha que llevaron a cabo las autoridades sanitarias del país fue enfocada en una gran cantidad de negacionistas del COVID-19 primero y la vacuna posteriormente. Ahora la lucha se ha trasladado a los detractores del pasaporte verde.

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