Irineo Garzón Martínez, de 35 años, el comerciante argentino acusado de violar a una joven venezolana, fue arrestado el jueves, en un caso que despertó indignación a raíz de la primera orden judicial que disponía mantenerlo en libertad.
En el momento de la detención de Garzón Martínez, esposado y con la cabeza cubierta, grupos de vecinos del barrio capitalino de Mataderos (suroeste), entre otros manifestantes, le gritaban en la calle “¡Violador!”, según imágenes de la televisión.
Una venezolana de 18 años había denunciado ante la justicia que el 23 de enero fue drogada y abusada sexualmente en una tienda del comercial barrio de Once, tras ser citada para una oferta de trabajo.
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El imputado había sido detenido aquel día. Tras alegar su abogado que la relación había sido consentida, la jueza a cargo lo liberó, aunque con una tobillera electrónica de vigilancia remota.
En un video que circula este jueves en redes sociales, la madre de la denunciante, identificada como Thays, afirma entre sollozos: “¡Lo logramos, hija!”.
La justicia mantiene en reserva el nombre de la víctima. El giro en la investigación y el arresto se produjeron por orden de un tribunal de apelaciones que revocó la decisión de la magistrada. La fiscalía apoyó la apelación.
El día de los hechos, policías dijeron haber hallado a la joven semidesnuda y adormecida en el local de venta de ropa donde el hombre la había convocado con fines laborales.
Antes de perder el conocimiento la joven pudo pedir auxilio por teléfono a su familia, que llamó a la policía, según consta en el expediente del caso. Miembros de la comunidad venezolana en Argentina se manifestaron días atrás en las calles para reclamar la detención.
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El tribunal señaló, entre sus argumentos, “la naturaleza violenta del suceso investigado” y “las dudas que recaen sobre su arraigo” por haber dado diferentes domicilios.
Otro elemento de peso fue haberse negado a abrir la tienda cuando llegó la policía y su intento de fuga, evitado tras un forcejeo con los policías.
El abogado de la víctima, Pablo Blaqué, había declarado a la AFP que la causa es por un “abuso sexual agravado con acceso carnal”, con una pena máxima de 20 años.
En Venezuela, Diosdado Cabello, número dos del chavismo, se solidarizó días atrás con la víctima en su programa de televisión.
“Agarraron al tipo en flagrancia y lo pusieron en libertad porque no tiene antecedentes”, sostuvo el dirigente. “Ojalá que el gobierno argentino y la justicia puedan cumplir con el rol que les corresponde”, dijo Cabello.
Fuente: AFP.