La agencia europea de policía Europol pidió el lunes a los viajeros desconfiar de la venta en los aeropuertos de falsos certificados de pruebas negativas de COVID-19 por parte del crimen organizado, por sumas de hasta 300 euros pieza.
Esta advertencia ocurre tras la detención de varios sospechosos que venden falsos certificados de no contaminación en aeropuertos en Gran Bretaña y Francia, así como en línea o a través de grupos de mensajerías telefónicas en España y Holanda.
En España la policía detuvo a un hombre que vendía falsos documentos de ese tipo por 40 euros en línea y en Holanda traficantes hacían lo mismo utilizando aplicaciones de mensajería de telefonía móvil.
A inicios de noviembre, la policía francesa detuvo siete personas en el marco del desmantelamiento de un tráfico de falsos certificados de pruebas negativas de COVID-19 que usaban el nombre de un laboratorio existente, vendidos a precios de entre 150 a 300 euros en el aeropuerto de Roissy-Charles-de-Gaulle, cerca de París.
Hace 10 días, un hombre sospechoso de vender falsos certificados de no contaminación por COVID-19 fue detenido en el aeropuerto de Luton, en Gran Bretaña. Muchos países reclaman ahora la prueba de que los pasajeros no están contaminados por la enfermedad que ha matado a más de 2,2 millones de personas en el mundo.
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“Es muy probable que criminales aprovecharán la oportunidad de producir y vender falsos certificados de pruebas de COVID-19 mientras se mantengan las restricciones a los viajes a causa de la pandemia”, considera Europol.
“Dada la amplitud de los medios tecnológicos disponibles con impresoras de alta calidad y diversos programas, los falsificadores pueden producir documentos falsos de alta calidad”, agregó la agencia, con sede en La Haya (Holanda).
Fuente: AFP.