El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, saludó este domingo el “nuevo rumbo” de Estados Unidos como resultado de sus elecciones y expresó su voluntad de una relación “constructiva y respetuosa”.
“Reconocemos que en sus elecciones presidenciales, el pueblo de EEUU ha optado por un nuevo rumbo. Creemos en la posibilidad de una relación bilateral constructiva y respetuosa de las diferencias”, dijo el mandatario en su cuenta de Twitter en la primera reacción oficial en la isla.
Tras medio siglo de ruptura diplomática y tensiones políticas, Estados Unidos y Cuba restablecieron relaciones en el 2015 bajo el gobierno de Barack Obama, y comenzó un lento proceso de acercamiento y colaboración.
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Pero la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca en el 2017, llevó las relaciones a su punto más bajo, pues el nuevo mandatario dictó mas de 130 medidas para fortalecer el bloqueo contra Cuba y dar marcha atrás a los avances logrados bajo la administración de Obama.
El presidente electo, Joe Biden, fue vicepresidente de Obama y ha expresado su deseo de regresar las relaciones con la isla a los mismos causes de antes de la llegada de Trump.
Desconfianza
Para la mayoría de los cubanos que viven en la isla, el demócrata Joe Biden es un desconocido, una incógnita, pero están seguros de que cualquier presidente de Estados Unidos será mejor que Donald Trump.
“No soy de confiar en ningún presidente norteamericano, pero bueno, como están las cosas prefiero al otro y no a Trump”, dijo a la AFP Pablo Zaldívar, un parqueador de autos de 57 años.
Después de la histórica política de apertura con Cuba propiciada por Barack Obama, la administración Trump cayó como balde de agua fría para el país socialista. Su reelección hubiera sido “un desastre o una amenaza de Armagedón” para Cuba, asegura el politólogo Jorge Gómez Barata.
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En cuatro años aplicó 130 medidas para reforzar el bloqueo, muchas de las cuales afectan directamente a la población y al emergente sector privado, como la restricción de las remesas familiares, la suspensión de los viajes de cruceros y de la mayoría de los vuelos directos, y el cierre del consulado en La Habana.
Fuente: AFP.