Río de Janeiro, Brasil | AFP.
Las autoridades sanitarias de Rio de Janeiro registraron el jueves las seis primeras muertes causadas por el nuevo coronavirus en las favelas de esta ciudad brasileña.
La secretaria de Salud de Rio de Janeiro contabilizó dos fallecidos en la favela de Rocinha, la mayor de Brasil, que se alza en una colina con vistas a San Conrado y Gavea, barrios elegantes en el sur de la ciudad.
Los otros fallecidos fueron registrados en favelas en el norte de Rio, cerca del aeropuerto internacional: dos en Vigario Geral, una en Manguinhos y otra en Maré.
Las autoridades sanitarias no detallaron la fecha de los decesos. Las víctimas son cuatro hombres y dos mujeres, y la más joven tenía 48 años.
Las favelas concentran 1,5 millones de habitantes, es decir casi una cuarta parte de la población de la ciudad de Rio de Janeiro.
El distanciamiento social recomendado para evitar la propagación del virus es un desafío cotidiano en estas comunidades superpobladas, donde familias con varios miembros viven en hogares de una o dos piezas.
Además de infraestructura precaria, los habitantes sufren por los problemas de violencia debido a la presencia de grupos de narcotraficantes o de milicias parapoliciales.
La noche del miércoles el ministro de la salud, Luiz Henrique Mandetta, destacó la necesidad de "dialogar" con estos grupos para luchar contra el coronavirus en estas comunidades.
Brasil supera los 15.000 casos de coronavirus y contabiliza 800 muertes, según el ministerio de la Salud. Del total, 1.938 casos pertenecen a Rio de Janeiro, que también registra 106 muertos, con una tasa de letalidad de 5,5%.
"Tenemos que entender la cultura, la dinámica (de las favelas). Tenemos que entender que son áreas donde el estado muchas veces está ausente, que quien manda allí es el narcotráfico, que quien manda allí son las milicias", dijo Mandetta en una conferencia de prensa en Brasilia.
"¿Cómo construir ese puente con la vida, con la salud? Dialogando, sí, con el tráfico, con la milicia, porque ellos también son seres humanos y precisan colaborar, ayudar, participar", añadió el ministro.
Muchos habitantes de las favelas trabajan en el sector informal y debido a las medidas de cuarentena parcial implementadas para la contención de la propagación del virus, no están recibiendo ingresos económicos.
En este sentido, el gobierno comenzó este jueves a distribuir un auxilio económico para trabajadores informales, autónomos y microemprendedores que oscila entre 600 y 1.200 reales (118-236 USD) por mes.
También diversas ONG se movilizaron para distribuir cestas básicas y productos de primera necesidad en las favelas.