Santiago, Chile | AFP.
El presidente de Chile, Sebastián Piñera, decretó el "estado de excepción constitucional por catástrofe", medida que deja en manos de las Fuerzas Armadas el resguardo del orden y la seguridad, en momentos que los casos de coronavirus aumentaron a 238 en el país.
"Hoy, ejerciendo mis facultades constitucionales he decretado el estado de excepción constitucional por catástrofe", afirmó el mandatario, medida que tendrá una vigencia de 90 días.
El estado de excepción, según Piñera, permitirá dar mayor seguridad a todos los hospitales y sitios de atención de salud, proteger la cadena logística, el traslado de insumos médicos, y facilitar el cuidado y traslado de pacientes y personal médico.
Adicionalmente, permitirá resguardar el cumplimiento de las cuarentenas y de las medidas de aislamiento social, junto con garantizar la cadena de producción y distribución para asegurar el normal abastecimiento de la población, ante una mayor demanda en supermercados y farmacias.
"Las Fuerzas Armadas podrán actuar como verdaderas fuerzas sanitarias, colaborando con todos los funcionarios de nuestro sistema de salud", dijo Piñera.
De esta manera el gobierno chileno vuelve a sacar a los militares a las calles, como lo hizo durante los primeros 10 días que siguieron al estallido social que empezó el 18 de octubre, en medio de fuertes críticas por el accionar de las tropas en las calles.
La medida de excepción decretada este miércoles permite al presidente dictar una serie de medidas, "incluyendo la restricción de reuniones en espacios públicos, asegurar la distribución de bienes y servicios básicos, ordenar la formación de reservas de alimentos y otros bienes necesarios para la atención y subsistencia de la población".
Adicionalmente, permite "establecer cuarentenas o toques de queda, dictar medidas para la protección de servicios de utilidad pública, y limitar el tránsito o locomoción de personas", explicó Piñera.
Hasta este miércoles, Chile contabiliza 238 personas infectados por coronavirus y aunque hay pacientes con asistencia respiratoria ninguno corre peligro vital, precisó el ministerio de Salud.