Santiago, Chile | AFP |
El movimiento de carga en contenedores en los puertos de América Latina y el Caribe aumentó 7,7% durante 2018 en relación al año anterior, con un volumen movilizado de 53,2 millones de TEU, informó el miércoles la Cepal.
El análisis incluye una muestra de 31 países y 118 puertos y zonas portuarias de la región.
"Los datos mantuvieron en gran parte la heterogeneidad mostrada en el comportamiento de los movimientos portuarios en períodos previos, tanto a nivel de puertos como de países. Del total de la muestra, 66 puertos y zonas portuarias mejoraron sus cifras con respecto a 2017", explica la Cepal.
En volumen total la actividad en 2018 superó los 53,2 millones de TEU o 'Unidad equivalente a veinte pies', que es una medición estándar de una caja transferida.
El volumen transportado por la región, en tanto, representa un 7,1% del movimiento de contenedores mundial.
Diez países de la región operaron el 84,1% del movimiento total: Brasil, México, Panamá, Colombia, Chile, Perú, Argentina, Ecuador, República Dominicana y Jamaica.
El puerto de Colón, en Panamá, lidera la posición regional, con 4.324.478 de TEU movilizadas el año pasado, seguido del puerto de Santos en Brasil (con 3.836.487 de TEU) y de Manzanillos en México (3.070.505 de TEU)
A nivel mundial, el movimiento de puertos fue encabezado en 2018 por Shanghai (China), con 42.010.000 de TEU movilizados.
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Industrializar es la clave para superar la “triple trampa” que impide el desarrollo sostenible
El Centro de Estudios Económicos (CEE) de la Unión Industrial Paraguaya (UIP) analizó las causas de una serie de problemas o desafíos estructurales, que según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) impiden el desarrollo sostenible en América Latina y el Caribe, a los cuales denominó la “triple trampa”.
Estas trampas o desafíos, serían el bajo crecimiento económico, la alta desigualdad y las deficiencias en la gobernanza e institucionalidad, y la idea del CEE es comprenderlas de modo a proponer soluciones prácticas para Paraguay, entre las cuales se destaca la industrialización.
Lo que el CEE dice es que la industrialización acelerada podría ser un factor determinante para superar los obstáculos del desarrollo que enumera la Cepal. “Al potenciar la industria en su economía, el país no solo puede aspirar a un crecimiento sostenido, sino también a la generación de empleos de calidad que eleven la productividad y activen un ciclo positivo de inversión y progreso”, indica.
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Mucho por mejorar
Es lo que mencionó el jefe senior del CEE, Julio Fernández, con relación al impacto de la industrialización para superar la triple trampa, y aunque Paraguay esté en varios aspectos mejor que el promedio latinoamericano, aún tiene mucho que mejorar para un mayor bienestar tanto económico como social.
El referente explica además que más allá de los beneficios económicos, la industrialización tiene el potencial de transformar profundamente la cohesión social de Paraguay, reduciendo las desigualdades y ampliando el acceso a trabajos formales que mejoren el bienestar de la población, a más de fortalecer la movilidad social.
Aclaró igualmente que el impulso hacia un desarrollo industrial requerirá de regulaciones eficaces y una gobernanza sólida, generando un ambiente que promueva la transparencia y fomente la confianza de la institucionalidad. Esto contribuirá no solo para ser atractivos a la inversión extranjera, sino que también consolidará la estabilidad necesaria para un crecimiento inclusivo y sostenible.
Las “trampas”
Con relación a las trampas señaladas por la Cepal, Fernández indicó que la primera que tiene que ver con el bajo crecimiento, es la falta de dinamismo económico. En cuanto a la segunda trampa de una alta desigualdad, baja movilidad y cohesión social, explicó que la concentración del ingreso generó un movimiento social muy limitado, que impidió que las personas de sectores más desfavorecidos pudieran mejorar su calidad de vida.
Por último, la trampa de baja capacidad institucional y gobernanza poco efectiva, compartió que en el caso de Paraguay, el Índice de Estado de Derecho (IED) es el tercer más bajo de la región, lo que refleja las debilidades estructurales en la gobernanza y el Estado de derecho en el país. Además de que el 60 % de las instituciones públicas se encuentra en situación deficiente, según la Evaluación de Efectividad de Control Interno del sector público, realizada por la Contraloría General de la República.
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Informe Cepal: la pobreza en América Latina bajará a 26,8 %, cifra más baja en 34 años
La tasa de pobreza en América Latina disminuirá 0,5 puntos porcentuales en 2024 respecto al año anterior, para alcanzar al 26,8 % de la población regional, la cifra más baja desde 1990, estimó este martes la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
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La pobreza afectará en 2024 a 170 millones de latinoamericanos. De esa cifra, 66 millones viven en la pobreza extrema, equivalente al 10,4 % de la población, cuyo nivel de ingresos no permite satisfacer sus necesidades básicas, detalló la Cepal en el documento “Panorama Social de América Latina y el Caribe 2024″ divulgado este martes en rueda de prensa.
Pese a la caída respecto a 2023 (27,3 %), “América Latina ha mostrado en los últimos diez años un progreso lento en la reducción de la pobreza”, agregó el reporte.
Desde 1990 a 2014 la pobreza se redujo de manera sostenida en América Latina, pasando de 51,2 % a 27,7 %. “Pero su reducción se atenuó a partir de entonces y aumentó con la pandemia”, aseguró el secretario ejecutivo de la Cepal, José Manuel Salazar-Xirinachs.
Según el organismo dependiente de Naciones Unidas, la lenta disminución de la pobreza se debe a la “baja capacidad (de las economías regionales) para crecer” y “alta desigualdad, baja movilidad social y débil cohesión social” que presenta la región.
Los países de América Latina alcanzarán este año un crecimiento de 1,8 %, siguiendo una trayectoria de bajo crecimiento económico debido a la alta inflación y a tasas de interés que se mantienen altas a nivel mundial.
En 2023 la disminución de la pobreza regional fue de 1,5 puntos porcentuales frente al año previo (28,8 %), debido principalmente a la evolución de los indicadores de Brasil.
“El número de personas que salieron de la pobreza en ese país equivale al 80 % de la variación del indicador a nivel latinoamericano”, sostuvo el informe.
Fuente: AFP
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Cepal mantiene proyección de crecimiento económico
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) actualizó ayer martes sus proyecciones de crecimiento económico para la región en este 2024 y mantuvo para Paraguay su estimación inicial de 3,8 %, que está alineada con la proyecciones oficiales del Banco Central del Paraguay. Se trata de una de las tasas más altas, pese al complejo e incierto panorama que enfrenta la región, con la desaceleración de la expansión de la actividad económica.
A inicios de año, el organismo internacional ya había proyectado para el país un crecimiento del producto interno bruto (PIB) de 3,8 %, que finalmente se confirmó el pasado lunes a partir de la presentación del Estudio Económico de América Latina y el Caribe, 2024: trampa de bajo crecimiento, cambio climático y dinámica del empleo. Paraguay se sitúa como el segundo con mayor dinamismo en la región de América del Sur, después de Venezuela, que tiene una proyección del 5 % de crecimiento.
La proyección de Cepal coincide con las estimaciones oficiales del Banco Central del Paraguay (BCP), cuya proyección oficial de crecimiento del PIB para este año es de 3,8 %. Mientras el país se mantiene en esta cifra, en un contexto regional de desaceleración económica, el crecimiento local se destaca en la región y se ubicaría por encima de países como Uruguay (3,6 %), Perú (2,6 %), Chile (2,6 %) y Brasil (2,3 %). En general, se espera que América Latina y el Caribe continúe con una trayectoria de bajo crecimiento en 2024, a una tasa promedio del 1,8 %. Por el contrario, para 2025 se espera un crecimiento mayor del 2,3 % en toda la región. Este repunte se explicaría, en particular, por el desempeño de América del Sur, donde nuevamente se destaca Paraguay, con un crecimiento de 3,6 % para el año siguiente.
DESACELERACIÓN REGIONAL
Según Cepal, el modesto crecimiento económico en la región sigue condicionado por un contexto internacional incierto, marcado por un elevado nivel de inflación y tasas de interés que se mantienen altas a nivel mundial, lo que tiende a retrasar el retorno a la normalidad de la dinámica inflacionaria y el ciclo de flexibilización de las políticas monetarias en los principales países avanzados, incidiendo en una merma de la demanda externa y la persistencia de las condiciones financieras restrictivas.
De acuerdo con el organismo internacional, esta situación puede verse agravada por un posible incremento de las tensiones geopolíticas y comerciales, así como por el empeoramiento de los efectos del cambio climático, en un entorno de baja productividad laboral y poca creación de empleos formales. Así, la postura restrictiva de la política monetaria tiende a menoscabar la demanda interna y deprimir la inversión, que está en declive.
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Cepal mantiene proyección de crecimiento económico para Paraguay en 3,8 %
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) actualizó este martes sus proyecciones de crecimiento económico para la región en este 2024 y mantuvo para Paraguay su estimación inicial de 3,8 %, que está alineada con la proyecciones oficiales del Banco Central del Paraguay. Se trata de una de las tasas más altas, pese al complejo e incierto panorama que enfrenta la región, con la desaceleración de la expansión de la actividad económica.
A inicios de año, el organismo internacional ya había proyectado para el país un crecimiento del producto interno bruto (PIB) de 3,8 %, que finalmente se confirmó este lunes a partir de la presentación del Estudio Económico de América Latina y el Caribe, 2024: trampa de bajo crecimiento, cambio climático y dinámica del empleo. Paraguay se sitúa como el segundo con mayor dinamismo en la región de América del Sur, después de Venezuela, que tiene una proyección del 5 % de crecimiento.
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La proyección de Cepal coincide con las estimaciones oficiales del Banco Central del Paraguay (BCP), cuya proyección oficial de crecimiento del PIB para este año es de 3,8 %. Mientras el país se mantiene en esta cifra, en un contexto regional de desaceleración económica, el crecimiento local se destaca en la región y se ubicaría por encima de países como Uruguay (3,6 %), Perú (2,6 %), Chile (2,6 %) y Brasil (2,3 %).
En general, se espera que América Latina y el Caribe continúe con una trayectoria de bajo crecimiento en 2024, a una tasa promedio del 1,8 %. Por el contrario, para 2025 se espera un crecimiento mayor, del 2,3 % en toda la región. Este repunte se explicaría, en particular, por el desempeño de América del Sur, donde nuevamente se destaca Paraguay, con un crecimiento de 3,6 % para el año siguiente.
Desaceleración regional
Según Cepal, el modesto crecimiento económico en la región sigue condicionado por un contexto internacional incierto, marcado por un elevado nivel de inflación y tasas de interés que se mantienen altas a nivel mundial, lo que tiende a retrasar el retorno a la normalidad de la dinámica inflacionaria y el ciclo de flexibilización de las políticas monetarias en los principales países avanzados, incidiendo en una merma de la demanda externa y la persistencia de las condiciones financieras restrictivas.
De acuerdo con el organismo internacional, esta situación puede verse agravada por un posible incremento de las tensiones geopolíticas y comerciales, así como por el empeoramiento de los efectos del cambio climático, en un entorno de baja productividad laboral y poca creación de empleos formales. Así, la postura restrictiva de la política monetaria tiende a menoscabar la demanda interna y deprimir la inversión, que está en declive.
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