La historia de amor de Ana Fernández (72) y Arturo Quintana (40) ganó notoriedad luego de que ambos decidieran unir sus vidas en matrimonio, tanto en el ámbito civil como en el religioso, sin importar la diferencia de edad, que supera los 30 años. Los enamorados consolidaron su relación de pareja y amistad a lo largo de los años y estuvieron para acompañarse mutuamente en los momentos más difíciles, demostrando nuevamente que la edad no es un impedimento para el amor.

Según trascendió, Ana y Arturo se conocieron por casualidad en una fiesta, donde ambos se “flecharon” tras bailar juntos por primera vez. Tras este primer encuentro, empezaron con el paso de las semanas a conocerse y a establecer una relación de noviazgo, que finalmente terminó en el altar. Pese a la diferencia de edad, de 32 años, ambos se mostraron muy enamorados y felices de dar este gran paso, con el apoyo de sus seres queridos.

Al inicio, no todo fue color de rosa. Los familiares de Ana no aprobaban la relación, desconfiando de las intenciones de Arturo. Lejos de rendirse, el enamorado logró ganarse la confianza de todos y demostrar que es un buen hombre, acompañando a su pareja en los momentos más difíciles como la batalla contra el covid-19 desde el hospital. Hoy, ambos disfrutan de su amor y están muy felices de iniciar esta nueva etapa como marido y mujer.

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“Al principio, con mi hermana no estábamos de acuerdo, porque la diferencia (de edad) es muy grande y pensábamos que él se burlaba de ella, que solo quería pasar el rato, pero con los años nos demostró que él la amaba incondicionalmente contra viento y marea. Mi mamá era viuda y Arturo le devolvió las fuerzas de seguir confiando en el amor”, comentó Carolina, una de las hijas de Ana, a Crónica/Nación Media.

La pareja de enamorados se animó a confiar en el amor y siguió los pasos de Ña Rufina y Juan Ramón, quienes se casaron en abril pasado y movilizaron a todo un país para su matrimonio en el distrito de Lima, San Pedro.

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