¿Quién diría que un gatito callejero se convertiría el amuleto de la suerte de los pilotos del F1? El felino fue bautizado como “Formulino”, es reconocido y buscado en el mundo de las carreras por varios pilotos del máximo circuito del deporte, ya que se cree que quienes se cruzan con él tendrán buenos resultados en sus competencias.

Formulino saltó a la fama en el 2020, durante el Gran Premio de Emilia-Romagna. En aquel entonces estaba paseando por el paddock del circuito de Enzo Ferrari y terminó en el garage de Lewis Hamilton, piloto de Mercedes Benz. Hamilton no pudo resistir a los encantos del michi y le regaló algunas caricias, el momento quedó registrado por su equipo y dijeron en redes que Lewis había sido “bendecido por el gato de Ímola”.

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Durante el evento, Sebastián Vettel -piloto de Ferrari- también tuvo un encuentro con Formulino, pero el conductor confesó que no le gustan los gatos y que su presencia no lo entusiasmó. Poco después, Hamilton se quedó con su primera victoria en el circuito Enzo Ferrari y Sebastián Vettel no llegó a sumar ni un punto tras terminar en el puesto 12. Muchos aseguran que Formulino fue el toque de suerte extra.

Formulino se convirtió en un gato muy apreciado para los fanáticos de la F1, vive en el circuito italiano y cuenta con su propio pase VIP para las carreras, por lo que puede pasearse por todo el paddock sin ningún tipo de problema e incluso disfruta de algunos lujos. También cuenta con su propias redes sociales, @formulinotheking, donde se autoproclama “dueño del autódromo Ímola”.

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