Cansada de las humillaciones hacia las mujeres en el volante, la chofer profesional María Emilia Villalba en su tiempo libre brinda clases a mujeres para aprender no solo a manejar, sino también los conocimientos básicos de mecánica, para que la mujer sea autónoma al desplazarse en su automóvil.

Como aval de su experiencia en tránsito, Villalba tiene 11 años como voluntaria de la séptima compañía de bomberos de San Lorenzo, donde es la encargada de conducir el carro de este cuartel; y su actividad profesional suma 14 años al volante para el sistema de ambulancias Servicio de Emergencia Médica Extrahospitalario (SEME) de Asunción.

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“Decidí yo en mis tiempos libres darle mis conocimientos a otras mujeres”, aseguró María, que es apreciada por sus alumnas por su paciencia al transmitir sus conocimientos, además enseña también a otras mujeres que estén interesadas en convertirse en conductoras de vehículos de bomberos y ambulancias, que son cargos comunes para hombres. La conductora de rodados de emergencia puede ser ubicada en Facebook como Mmaría e Gimenez.

“Prácticamente, desde los 11 años empecé manejando, la profesión que yo tengo es herencia de mi papá”, dijo, en entrevista con NPY, sobre la influencia de un humilde colectivero para marcar la digna profesión de su hija. Por otra parte, la conductora aseguró que en el cotidiano de su oficio percibe principalmente dificultades porque las personas no conocen las reglamentaciones de tránsito.

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“Realmente todas las chicas que me escribieron y me llamaron, que estoy enseñando, me dicen: ‘No me tienen paciencia´, ´No me tiene paciencia mi marido´, ´Mi hijo no me tiene paciencia´. Entonces, que más una mujer para enseñarle a otra mujer, obviamente con mucha paciencia. No hablamos de manejar nomás, hablamos de revisar tu motor, cambiar una rueda, prácticamente lo básico para poder encargarte de tu propio vehículo, que no estés dependiendo de nadie para eso”, explicó María Emilia.

La chofer aseguró que se sintió menospreciada por ser mujer y ofrecer su servicio como conductora, incluso por los propios paramédicos que la acompañan en la ambulancia realizan ocasionalmente expresiones injustas como: “Seguro es mujer”, cuando la conductora no puede avanzar en una emergencia por no tener paso de parte de otros automovilistas.

La mujer se formó como chofer profesional en la Municipalidad de Asunción, resultó la mejor de su grupo, por lo que al egresarse se empleó como conductora de grúas, para luego ser contratada como chofer de ambulancias por SEME, y como bombera maneja la autobomba y la ambulancia de la compañía de bomberos voluntarios de San Lorenzo.

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