Aunque parezca mentira el caso ocurrido en la Argentina, de una mujer que denunció a su vecino porque le molesta que “haga asado todos los días”, la historia es real y se viralizó. Fue tanta la repercusión del caso que tomó trascendencia internacional.

El conflicto se generó entre dos vecinos de Villa María, en la ciudad de Córdoba. Las familias viven en casas contiguas en barrio Lamadrid. Una mujer presentó una queja formal ante la Defensoría tras cansarse de golpear la puerta del vecino y pedirle que deje de comer asados, así literalmente. Increíble pero verdad.

Según especifica la denuncia que saltó a la luz por Cadena 3, el enojo de la señora no es por el humo que se genera al prender el fuego o que pueda ahumar su ropa cuando pasa al otro lado del patio, tampoco por los ruidos de música, algarabía y las voces de los vecinos que felizmente se juntan a comer una buena carne a la parrilla y quizás celebrar algo, sino que el problema es, literalmente, por hacer asados todas las noches o noche de por medio.

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La insólita pelea entre vecinos viene de larga data. La Defensoría del Pueblo cordobesa tuvo que intervenir y tomar la decisión de citar a las partes involucradas para resolver el conflicto a través de una audiencia de mediación.

“La molestia no es porque la ropa colgada de la vecina se llene de olor a humo, que haya música fuerte o que se escuchen los gritos de los comensales. El fastidio es simplemente porque comen asado, justificándose en los precios que hoy tiene la carne”, precisó Alicia Peressutti, titular de la Defensoría del Pueblo de Villa María, quien además calificó la denuncia de “insólita”.

La Defensoría del Pueblo reaccionó a la demanda y ahora deberá tomar una resolución. “Una de las posibles soluciones sería que los vecinos denunciados limiten la cantidad de veces que realizan los asados. O que, quienes hacen los asados, inviten a la familia afectada”, alegó Peressutti, quien admitió que no hay muchas respuestas posibles ante el reclamo.

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