A pesar de que en los últimos tiempos ha atravesado por momentos muy difíciles a causa de la pandemia del COVID-19, el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias y del Ambiente (Ineram) también se ha ganado a un nuevo miembro.
Se trata del perrito guardián llamado “Milaneso”, a quien los visitantes del lugar decidieron llamarlo así debido a que le encantan las milanesas, además del balanceado. Lo llamativo también es que el joven animalito llega todos los días hasta el portón del hospital para escuchar el informe médico que los profesionales brindan a diario a los familiares de los internados.
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Es como si estuviese esperando atento al llamado de su dueño o esperando a alguien; y aunque nadie sabe cómo ni cuándo apareció, el canino ha logrado el aprecio todos los que lo conocieron, ya que gracias a su nobleza y cariño, cuenta con su propia carpa que le fue donada por un visitante y que está ubicada en el patio del centro hospitalario.
Los visitantes del lugar aseguran que el perro no es igual a otros, debido a su comportamiento. Es fiel, atento, siempre está presente, incluso muchos lo tienen como compañero durante su estadía. Lamentablemente no se sabe si lo olvidaron o quien lo tenía falleció.
Lo cierto y concreto es que él también forma parte del plantel del nosocomio, brindando con su presencia afecto y contención a todos los que se le acercan. Si continúa allí sin que nadie lo busque, uno de los vecinos de la zona lo rescatará y lo tomará en adopción, para cuidarle y brindarle un hogar.