Ya hemos entrado en la época más linda del año. Llegan las fiestas de fin de año y con ellas las emociones están a flor de piel. Ya nos preguntamos cómo vamos a decorar este año la casa para celebrar la Navidad y el Año Nuevo.
Según el Feng Shui, la milenaria filosofía oriental que se centra en la armonización de las personas con su entorno, lo primero que uno tiene que hacer antes de armar el arbolito y todo lo demás es abocarse a una limpieza profunda de la casa y a deshacernos de objetos que sobran y que bloquean la energía positiva. La idea es poder disfrutar de un ambiente más armonioso y equilibrado donde se pueda sentir realmente la buena vibra.
Recordemos que el Feng Shui se basa en la creencia de que el diseño y cómo disponemos de nuestro espacio pueden influir en nuestra energía vital o “Chi”. Así es que manos a la obra y a dedicar unos días a esa limpieza, aprovechando también para desapegarnos de objetos que ya no utilizamos y que podríamos donar o reciclar. Mover muebles e incorporar nuevas piezas elegidas con mucho criterio nos ayudará a recibir la Navidad y el Nuevo Año con energías renovadas.
Es tiempo de deshacerse de objetos que sobran y que bloquean la energía positiva.