Decir que fue una noche espectacular es quedarse corto, pues la experiencia audiovisual vivida en El Retrovisor Gold Edition tuvo matices únicos e imponentes. Radio Montecarlo de Nación Media celebró sus 30 años de exitosa trayectoria en el aire, reuniendo a todos sus seguidores en una cita muy especial de la emblemática fiesta, la más clásica e importante del país, que ofreció una edición dorada para festejar por todo lo alto el aniversario de la 100.9, la FM favorita de los amantes de la mejor música de todos los tiempos.
El court central del Yacht y Golf Club Paraguayo fue escenario de más de ocho inolvidables horas de diversión, donde cerca de 3.000 personas, llegadas desde distintos puntos del país y del exterior inclusive, disfrutaron de un emocionante viaje en el tiempo a través de la magia de la música, guiados por los mejores DJ del estilo retro de nuestro país.
Un escenario majestuoso con luces, sonidos y efectos especiales alucinantes hicieron que este festejo fuera verdaderamente épico, sumado a la vibrante energía de los miles de fanáticos de El Retrovisor reunidos en la ocasión. La noche arrancó con el show de la banda The Classic’s, que invitó a dar los primeros pasos de baile, haciendo un repaso por grandes éxitos del pop y el rock.
Subió luego al imponente escenario el DJ Pasto, arrancando la euforia de la concurrencia, seguido del popular DJ Peajero, que llegó con fuegos artificiales, elevando los decibeles de la emoción. Vino después el turno del DJ Jorge “Conejo” González, quien se adueñó de la escena junto con un animador de lujo, Mario Ferreiro, un verdadero emblema de las fiestas asuncenas, quien puso su toque particular al evento, memorando anécdotas de épocas doradas de las icónicas discotecas de los 80, 90 e inicios de 2000. Los DJ Juan José Salerno y Emilio Marín, con todo su bagaje de ritmos electrónicos, siguieron en el comando de la consola, cerrando de espectacular manera una fiesta que, sin duda alguna, quedará en la memoria y en el corazón de todos los que tuvieron la ocasión de vivirla.