El exfutbolista Nelson “Pipino” Cuevas y la modelo Alicia Ramírez están a punto de cumplir 21 años de relación. Forman una de las parejas de famosos más estables y queridas del país, de gran suceso en las redes sociales donde cautivan con sus dotes artísticas. El matrimonio abrió las puertas de su hogar a La Nación del Finde para contarnos su increíble historia de amor en esta edición especial de San Valentín.

• Por Paz Godoy
• paz.godoy@nacionmedia.com
• Fotos Emilio Bazán y gentileza

Todo comenzó en 2003 cuando él se encon­traba en las filas del Club Atlético River Plate de Argentina y ella estaba en la cima de su carrera como modelo en nuestro país. “Yo estaba en Buenos Aires y Paola Hermann, que estaba de visita por allá, tenía una foto de Alicia Ramírez. Me dice: ‘Mirá, Pipino, ella es una chica maravillosa que tenés que conocerla’. ‘A ver’, le dije yo. Evidentemente, yo estaba en mi mejor momento, las chi­cas estaban todas ilusionadas por este morochito, fino, piel canela, tenía mucho pegue, entonces no le di importan­cia, guardé la revista y fui a mi casa”, relató Nelson Cuevas.

El exjugador de la selección paraguaya de fútbol recordó que unas horas más tarde decidió ver devuelta la imagen de la modelo y notó la belleza de quien ahora es su esposa. Entonces le pidió el contacto de la modelo a Paola Hermann, quien fue la Celes­tina de esta relación. Pipino no tardó en contactar con Alicia Ramírez, pero con una “men­tira piadosa” de por medio, pues el delantero no le reveló su verdadera identidad, sino que le dijo que era un perio­dista argentino que quería pautar una entrevista con ella.

“En ese momento yo estaba acostumbrada a las entrevis­tas y demás por mi trabajo. Yo le brindé mi información, luego vino a Paraguay, nos conocimos, pero yo no sabía quién era él. Mi hermano le ve y me dice: ‘Pero ese es Pipino Cuevas’”, contó Alicia Ramírez. La top había citado a Cuevas en el cumpleaños de una amiga. Como había lle­gado recién al país, lo invitó a disfrutar de un encuentro social antes de la supuesta entrevista. Pero grande fue la sorpresa de ella al saber la verdadera identidad del deportista, a quien desconocía totalmente por no estar muy empapada del mundo futbo­lístico en ese tiempo. Por su parte, Cuevas llegó a la fiesta en una lujosa camioneta del año, pero al ver que la modelo se encontraba acompañada de un hombre (el hermano de Alicia), decidió retirarse del lugar. Sin embargo, movido por el fanatismo hacia la estre­lla de la Albirroja, el hermano de la top decidió perseguir el rodado de Cuevas, a bordo de una motocicleta en la que también se montó la modelo. Una escena de película.

Lograron alcanzar a Pipino en un semáforo donde el hermano de Alicia lo saludó y le presentó a su hermana. Impactado por la belleza de la modelo y aclarada la situación de que ella no tenía novio, el deportista le invitó a subir a su camioneta y se dio el flechazo entre los dos. Conectaron enseguida y Cupido hizo lo suyo.

Retornaron a la fiesta toma­dos de la mano por iniciativa de Alicia, recordó el exjugador. En el cumpleaños, los invita­dos reconocieron al crack del fútbol, pidiéndole una foto­grafía o un autógrafo, situa­ción que sorprendió a la top quien desconocía por com­pleto el arrastre que tenía el jugador del momento.

En los días subsiguientes, Pipino se dio a la tarea de con­quistar a Alicia y a su familia, con visitas, serenatas y paseos. Fue en la ciudad de San Ber­nardino donde se dieron el primer beso, por pedido de la top. Luego el deportista vol­vió a sus actividades en Bue­nos Aires, sin antes hablar con los padres de la modelo e informarles de sus intencio­nes hacia su hija. Tuvieron una breve relación a distancia, luego Ramírez tomó la deci­sión de seguir a su corazón y acompañar al futbolista en su carrera que se desarrolló en varios países del mundo.

Pipino y Alicia decidieron finalmente casarse el 30 de diciembre de 2011. Tienen tres hijos: Enzo (15), Amapola (11) y Leonel (9).

“Tolerancia y amor. Yo creo que con el amor todo se puede sobrellevar. Y también hay que entender que nadie es perfecto, y que si se quiere formar algo estable, se debe ceder, pero también hacerse respetar”. (Alicia Ramírez)

Si bien también tuvieron que afrontar momentos difíciles, como cual­quier pareja, desde hace más de dos décadas sostienen su relación sobre la base del respeto, el amor y la tolerancia. Dieron su consejo para construir una sólida unión de pareja. “Yo creo que con el amor todo se puede sobrellevar. Y también hay que entender que nadie es perfecto, y que si se quiere formar algo estable, se debe ceder, pero también hacerse respetar”, afirmó Alicia. Cuevas agregó que lo ideal es “encontrar a la persona que pueda congeniar contigo y tener mucho diálogo y respeto”.