Luego de la celebración de las fiestas de Navidad y Año Nuevo, la fecha ineludible en el calendario es el festejo del Día de Reyes. El Mercado 4 fue nuevamente el punto de encuentro de centenares de “reyes” en busca del mejor presente. Las cámaras de La Nación/Nación Media estuvieron ahí para captar singulares imágenes.

Fotos: Néstor Soto y Jorge Jara

Los zapatitos en la ventana pasan la noche a la espera del milagro. Y como manda la tradición, a la mañana del 6 de enero aparecen los regalos. Muchos chicos hacen realidad los pedidos hechos en sus entusiastas cartitas para los Reyes Magos, otros amenacen con algún regalo sorpresa. Cada año, la fecha llama a continuar la magia, a dar un merecido premio a los niños “que se portan bien” y a recordar también aquel momento histórico del nacimiento de Jesús y la visita de los magos del Oriente.

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Pero para que la magia se cumpla, los “reyes” deben hacer lo suyo. Las ofertas pululan en todas partes… cochecitos, muñecas, bicicletas, de todos los colores y marcas, pero si hay un sitio donde por tradición los “reyes” prefieren, ese es el Mercado 4 de Asunción.

Como cada año, el tradicional centro de compras, en la zona de la avenida Pettirossi, se vio abarrotado de juguetes de todo tipo y de todos los precios. Las codiciadas bicicletas formaban extensas hileras en las veredas y las muñecas colgando de los techos de zinc esperaban terminar la semana en brazos de alguna niña que las cuide.

Las cámaras de los reporteros gráficos de La Nación/Nación Media captaron esos llamativos detalles del ritual antiguo. “Reyes” y “reinas”, que a pesar de la fatiga y muchas veces incluso de las limitaciones económicas, cumplieron con la tradición para seguir manteniendo viva la magia.


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