Leonor de Borbón, quien juró la Constitución el pasado martes 31 de octubre, día de su cumpleaños número 18, comparte el título de princesa heredera junto a otras tres aspirantes europeas al trono, en Países Bajos, Bélgica y Suecia. Esto marca un hito en la historia de las monarquías del viejo continente con una línea de sucesión encabezada por mujeres.

• Fotos AFP

Tras jurar lealtad a la Constitución en el Congreso español, la princesa de Asturias puede suceder legalmente a su padre, el rey Felipe VI, y convertirse automáticamente en jefa del Estado en caso de ausencia del monarca. De ascender al trono, Leonor se convertirá en la tercera reina titular –no con­sorte– de la historia de España, después de Juana I de Casti­lla, en el siglo XVI, e Isabel II, en el XIX.

Con este acto celebrado con pompa en Madrid, Leonor se une oficialmente al grupo de otras tres princesas herede­ras de coronas europeas con­formadas por Victoria de Sue­cia, duquesa de Västergötland; Catalina Amalia de Países Bajos, princesa de Orange; e Isabel de Bélgica, duquesa de Brabante.

Nacida el 31 de octubre de 2005, Leonor es la hija mayor del rey Felipe VI y la reina Leti­zia. Se convirtió en la heredera de la Corona española a los ocho años, cuando su abuelo, Juan Carlos I, abdicó y su padre ascendió al trono.

En España, la Constitución establece que tiene preferen­cia para heredar el hijo mayor del monarca, pero Leonor no tiene hermanos varones. De esta manera, será la primera mujer en asumir las jefatu­ras del Estado y de las Fuer­zas Armadas desde Isabel II (1833-1868).

Los nacimientos de Leonor y de su hermana Sofía (29 de abril de 2007) de una madre plebeya, una antigua perio­dista, ocuparon las portadas de la prensa rosa. Leonor estu­dió primaria en una escuela privada de Madrid y bachille­rato en régimen de internado en Gales, en el Reino Unido. Actualmente cursa tres años de formación militar, al igual que lo hizo su padre.

Catalina Amalia es la mayor de las tres hijas del rey holandés Guillermo Alejandro, casado con la argentina Máxima Zorreguieta. Nacida el 7 de diciembre de 2003, pronto celebrará sus veinte años. Se convirtió en princesa here­dera en 2013, cuando su padre subió al trono. Desde 1983, el hijo mayor del monarca de los Países Bajos hereda el poder, independientemente de su sexo (primogenitura abso­luta).

La pareja real y sus hijas viven en un palacio rodeado de bos­ques cerca de La Haya, donde Catalina Amalia asistió a la escuela antes de estudiar en la Universidad de Ámster­dam. Objeto de amenazas, se vio obligada, en 2022, a renun­ciar a mudarse a un aparta­mento compartido con otros estudiantes.

La princesa Isabel de Bélgica, nacida el 25 de octubre de 2001 en Anderlecht, es la hija mayor del rey Felipe y la reina Matilde. Es heredera al trono desde 2013. Como en Bélgica rige desde 1991 la primogeni­tura absoluta, Isabel se con­vertirá en la primera mujer al frente del reino desde 1830.

Dotada de un papel esencial­mente simbólico y represen­tativo, la monarquía belga es a menudo criticada por los separatistas flamencos. Isabel realizó sus estu­dios landés, una primicia en una familia real vista más bien como francófona.

Victoria, nacida el 14 de julio de 1977, sucederá al rey Carlos XVI Gustavo y se convertirá en la primera reina de Sue­cia en casi 300 años. Tiene un hermano, Car­los Felipe, y una her­mana, Magdalena. Carlos Felipe fue proclamado here­dero al nacer en 1979, pero una ley adoptada en Suecia en 1980 estableció la primogenitura absoluta y su carácter retroac­tivo, por lo que la heredera pasó a ser Victoria.

Victoria se beneficia de una alta popularidad en su país, donde una mayoría de la población quisiera que suce­diera de inmediato a su padre. Su matrimonio en 2010 con su antiguo entrenador en un gim­nasio, un plebeyo, concitó una enorme atención popular. La pareja tiene dos hijos: Estela, de 11 años, y Óscar, de 7.

Con cuatro futuras reinas, se marca un hito en la historia de las monarquías de Europa con una línea de sucesión que está encabezada por mujeres.