Las prendas en tonos claros o blancos son muy elegantes y versátiles, pero algo difíciles de mantener. Con el paso del tiempo tienden a tomar un color amarillento o a lucir percudidas, lo bueno es que existen trucos con productos naturales que ayudan a mantenerlas impecables.
La mejor manera de alargar la vida útil de una camisa, una blusa o vestido blanco es la prevención. Por ejemplo, lo blanco se lava con los blancos, y si es a mano, mejor. No hay que aplicarse perfumes, desodorantes o cremas con la ropa puesta, conviene hacerlo antes y esperar a que se asiente en el cuerpo. También es importante chequear que el agua que se usa para lavar la ropa esté limpia, ya que si tiene un tono marrón puede generar manchas y, finalmente, debes secar la ropa al sol, porque tiene un efecto blanqueador.
Si a pesar de esto las prendas se manchan o se percuden, podés aplicar los siguientes trucos:
-Bicarbonato: Para mantener las prendas blancas agregá 1/2 taza de bicarbonato al lavado habitual. En el caso de que haya manchas puntuales en las axilas, cuello y otras partes, prepará una pasta de bicarbonato y jugo de limón, aplicá en la zona afectada y dejá que actúe durante 15 minutos, después lavá la prenda con normalidad.
-Vinagre blanco: Además de blanquear, tiene un efecto suavizante y elimina olores por su efecto antibacteriano. Basta con sumergir la prenda en un recipiente con 1 litro de agua y 1 taza de vinagre, dejar reposar durante 40 minutos y después lavar con normalidad.
-Leche: Este truco antiguo es ideal para mantener el tono de las prendas blancas. El método es igual que con el vinagre blanco, hay que mezclar 1 taza de leche en 1 litro de agua, sumergir la ropa y dejar que repose durante 1 hora, después hay que lavar con el método habitual.
-Agua oxigenada: Este ingrediente es ideal porque ayuda a blanquear y cuidar las prendas delicadas porque no tiene cloro. Su aplicación es sencilla, hay que diluir 1/2 taza de agua oxigenada de 30 volúmenes en un litro de agua, luego hay que dejar las prendas en remojo durante un par de horas y después lavar con normalidad.
Cómo dar color a prendas con café
Ya sea que estés decorando, retapizando, haciendo manualidades o buscando darle un toque especial a tu guardarropas, tal vez quieras considerar utilizar café instantáneo como tinte. Teñir tela con café instantáneo no es caro, ni tóxico. Las fibras naturales como el algodón, la muselina y la ropa blanca o de un tono claro son perfectos para teñir con este material. El café otorga a la tela una rica sombra de café y hace que la tela se vea antigua o terrosa.
CÓMO HACERLO
Lava y seca la tela que quieres teñir. Esto quitará cualquier mancha, suciedad y desechos. No utilices suavizante de telas, ni toallitas suavizantes, y lava como normalmente lo harías, únicamente con detergente regular para ropa.
Con agua hirviendo, llena hasta la mitad la bandeja que utilizarás. El recipiente debe ser lo suficientemente grande como para sumergir tu tela. Para piezas grandes, tal vez necesites usar la bañera. Debes ser muy precavido cuando tiñas con café, ya que puede manchar la superficie de la bandeja junto con la tela.
Agrega café instantáneo a la bandeja con agua hirviendo. No existe una cantidad específica de café que necesites añadir. Lo mejor es empezar con poco y agregar más durante el proceso en lugar de utilizar mucho desde el principio. Revuelve en el agua la cantidad de café que elegiste hasta que se haya disuelto.
Sumerge la tela, la cual debe estar todavía húmeda después de lavarse, en la bandeja llena de café. Revuelve con la cuchara y empuja hacia abajo la tela de forma que quede completamente mojada y permanezca debajo del agua.
Deja la tela remojando en el café por lo menos una hora. Después de que haya pasado el tiempo, revisa la tela. Si ya alcanzó el color que quieres, sácala de la bandeja. Si el color aún no es lo suficientemente oscuro, deja la tela remojando y revísala frecuentemente.
Enjuaga la tela en agua fría. Si huele a café, puedes lavarla a mano con detergente suavizante. Como se dijo anteriormente, al lavar la tela se aclarará el color uno o dos tonos.
Coloca la tela en la secadora o al aire libre sin que le dé demasiado el sol y deja que se seque por completo antes de utilizarla.