Tras vivir más de una década fuera de Paraguay, el futbolista Hernán Pérez (33) y su esposa, Carol González de Pérez (31), están nuevamente instalados en el país, y con un emprendimiento gastronómico novedoso suman atractivo al movimiento turístico de la histórica localidad de Pirayú. La Nación del Finde los visitó.
- Por Rebeca Vázquez
- rebeca.vazquez@nacionmedia.com
- Fotos Nadia Monges
En diciembre se habilitó en la ciudad de Pirayú la parrillada De la Hacienda de mi Bea, un sitio único que ofrece a los clientes la posibilidad de experimentar la verdadera esencia del campo paraguayo, a través de diversos atractivos como la ambientación, el menú y un servicio de primer nivel. El proyecto surgió como una iniciativa familiar de Carol González de Pérez y el futbolista Hernán Pérez, quien militó en diversos clubes del exterior durante más de diez años y hoy está de regreso para continuar su carrera en Paraguay.
En conversación con La Nación del Finde, la esposa del deportista contó que, inicialmente, compraron un campo en familia a cuadras de la emblemática estación ferroviaria de Pirayú, con la idea de criar ganado. Esto fue hace siete años. Posteriormente, se montó una carnicería en el sitio y fue entonces que el hermano de la emprendedora sugirió la idea de ofrecer a la gente una “parrillada” como servicio gastronómico en la locación.
“Nos gustó la propuesta y empezamos a idear con Hernán un proyecto que pueda ofrecer un bar y una parrillada al estilo paraguayo. Nuestro propósito fue ambientar el sitio con todo lo que caracteriza al estilo de vida en el campo”, relató. El establecimiento está ubicado sobre la ruta que une Pirayú con Ypacaraí.
TRES CABAÑAS Y AVESTRUCES
Para iniciar este servicio gastronómico en De la Hacienda de mi Bea se levantaron tres cabañas, cada una de estas tiene características únicas. “La última tiene el estilo más patriótico, en los muebles se puede ver el rojo, blanco y azul de nuestra bandera”, mencionó Carol de Pérez.
Desde los mozos hasta los encargados de elaborar el menú, los trabajadores del sitio lucen la vestimenta característica del paraguayo de tierra adentro. Otro de los atractivos del lugar son los amistosos avestruces que se criaron en la locación, por lo que están acostumbrados a interactuar con los comensales. También hay espacio para karaoke y un mirador para disfrutar de los espectaculares atardeceres.
Además de la ambientación y el menú, como parte del servicio, los clientes tienen la posibilidad de conectarse con la naturaleza del lugar y experimentar la verdadera esencia del estilo de vida en el campo. “Hace poco implementamos servir los postres en palas y las bebidas en carretilla. A la gente le gusta muchísimo. Uno se puede sentar, comer y disfrutar”, expresó Carol, quien destacó que entre todos los emprendimientos que tienen en Pirayú, actualmente pueden ofrecer empleo a más de 80 lugareños.
EL ORIGEN DEL NOMBRE
Carol de Pérez indicó que el origen del nombre De la Hacienda de mi Bea guarda relación con la idea de conmemorar a su hermana Bea, quien falleció hace ochos años, tras sufrir una parálisis cerebral. “Cada hermano, cuando crea una empresa siempre lleva ese nombre. La verdad es que hasta hoy en día ese nombre nos trae muchísima suerte. Todos prometimos que siempre estaríamos unidos para recordarla”, aseguró. Con miras al futuro, la empresaria comentó que tienen deseos de seguir ampliando el emprendimiento, colocando más cabañas e inclusos sitios de alojamiento con el “estilo de un bungaló”. “La verdad es que tenemos muchísimos clientes que vienen desde distintas partes del país a visitarnos y queremos ofrecerles un sitio donde alojarse”, concluyó.
“Ideamos con Hernán un proyecto que pueda ofrecer un bar y una parrillada al estilo paraguayo. Nuestro propósito es que la gente disfrute de un ambiente con todo lo que caracteriza a la vida en el campo”, comentó Carol de Pérez.