Armar una casa para las vacaciones o para los fines de semana en el campo tiene sus particularidades ya que se tienen que tener en cuenta, por encima del estilo de la deco que nos guste, otros aspectos fundamentales para que el refugio resulte cómodo y funcional y sea ese remanso de paz que soñamos, sin perder de vista la calidez y el buen gusto en los detalles.
1 SIMPLEZA: Porque la idea principal para dejar la casa o el departamento en la ciudad ya sea por los fines de semana o durante las vacaciones de todas las temporadas es descansar y disfrutar. Y para lograr eso, hay que elegir la simplicidad y estética sin un estilo rebuscado ni demasiado audaz, ya que eso puede causar el efecto contrario a la calma. Los colores claros en paredes y los pisos rústicos o que imiten madera, fáciles de limpiar son los más aconsejados.
2 DEL LUGAR: Un detalle que conocen muy bien los decoradores más chic es tener en cuenta lo que se hace como artesanía u objetos que respondan al lugar donde está la casa. Por ejemplo, adornar paredes con cestería, usar cerámica del lugar para decorar y también muebles camperos si los hubiera o reciclar algo rústico.
3 TOQUES DE NOSTALGIA: Otro detalle importante a tener en cuenta es saber elegir muebles que ayuden al almacenaje y la comodidad con libertad. Por ejemplo, en una casa de campo se puede tener un bello ropero antiguo reciclado o una cómoda vieja restaurada repintada y puesta en valor en habitaciones y salas; un pie de máquina como mesa auxiliar o de sostén del lavabo de baño.
4 ESPACIOS CÓMODOS: Lo que no pueden faltar son espacios cómodos para dormir y descansar. Camas para todos y también sofás cama que ahora vienen en modelos bellos y accesibles que se pueden convertir en la solución a la hora de recibir alguna visita.
5 CALIDEZ Y ESTILO: Tener en cuenta las texturas que ayuden a dar calidez y estilo, como unas bellas hamacas en los porches y galerías, mantas en los sofás de la sala y tejidos rústicos como mantelería y ropa de cama. El color está permitido porque nos transmite alegría. Alfombras de sitio de tejido rústico como las de sisal son ideales por resistentes y estéticas.
Se puede tener un bello ropero antiguo reciclado o una cómoda vieja restaurada, repintada y puesta en valor en habitaciones y salas.