Su bajo costo y eficacia hacen que en las casas sean infaltables una vez que las bajas temperaturas se empiezan a sentir.
Este par es considerado uno de los remedios más populares para el dolor de garganta. Unas cucharaditas de miel y un poco de zumo de limón son el antiinflamatorio natural por excelencia para el organismo.
Durante los meses de otoño e invierno estamos más expuestos a las enfermedades derivadas del frío como resfriados, gripe, bronquitis y dolor de garganta, y la combinación de miel con limón ayuda a aliviar estas molestias. Su bajo costo y eficacia hacen que en las casas sean infaltables una vez que las bajas temperaturas se empiezan a sentir. Y es que su popularidad rige desde tiempos inmemorables en todo el mundo para suavizar la garganta irritada.
La miel posee múltiples propiedades beneficiosas para el organismo, ya que también mejora la capacidad digestiva, favoreciendo el movimiento intestinal y combatiendo el estreñimiento. Además, es considerado como alimento diurético, antioxidante, expectorante, digestivo y calmante natural.
Por su parte, el limón cuenta con un sabor cítrico y vitamina C, a la par contiene pequeñas cantidades de vitamina B y potasio, junto a otros compuestos como: ácido cítrico y flavonoides. Consumir unos 30 ml de jugo de limón ya aportaría el 21 por ciento de la vitamina C diaria recomendada.
INFUSIÓN
Tomar agua caliente con limón y miel es una manera tradicional de aliviar el dolor de garganta y la tos. Para prepararla se necesita cortar el limón a la mitad y quitar la mayor cantidad de semillas posibles, luego se exprime en una taza con la misma cantidad de miel. Una vez mezclados, se llena el recipiente con agua hervida. Cuanto más caliente sea la infusión, más alivio podrá proporcionar a la garganta.
Otra de las formas de consumir es colocando en una taza unas cucharaditas de miel y el zumo de limón, calentar en el microondas y tomar dos a tres cucharadas antes de dormir.
Una de las formas de consumir es colocando en una taza unas cucharaditas de miel y el zumo de limón, calentar en el microondas y tomar dos a tres cucharadas antes de dormir.