El Ministerio Público abrió una carpeta de investigación para identificar a los criminales que propiciaron intencionalmente las llamas en el Banco San Miguel, de Asunción, un área silvestre protegida, donde 40 hectáreas ya fueron consumidas por el fuego. Funcionarios de la Municipalidad de Asunción habían denunciado el hallazgo de bidones con combustibles en la zona.
Desde el sábado pasado hasta hoy lunes, Bomberos Voluntarios del Paraguay (CBVP), funcionarios de la comuna, Fuerzas Armadas, Secretaria de Emergencia Nacional (SEN) y bomberos de la Policía Nacional, trabajan para poder controlar las llamas que consumieron la zona de la Costanera de Asunción y que afectaron a más de 200 familias. Esta tarde el fuego se reavivó y se sigue trabajando para controlar los incendios.
Durante la jornada de hoy, la Fiscalía designó a la agente fiscal Lisa Martínez, de la Unidad Penal n° 2, especializada en Delitos Ambientales, para iniciar las investigaciones relacionadas con los incendios registrados en la zona del Banco San Miguel. La misma solicitó la colaboración de la Policía para identificar a los responsables del inicio de los focos de incendio.
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Desde la Dirección de Prevención de Incendios de la Municipalidad de Asunción, indicaron que las llamas habrían sido provocadas atendiendo a que se hallaron botellas con combustible donde se iniciaron los incendios en ambos días. Actualmente, la Fiscalía trabaja con la Policía Nacional, la Dirección de Investigación Criminal, la comuna y de los bomberos voluntarios que intervinieron durante los siniestros.
El sábado 18 de enero de 2025, una comitiva fiscal se constituyó en la zona del Banco San Miguel, y en el lugar se verificó la presencia de múltiples focos de incendio. En tanto que, el domingo, se volvieron a tener nuevos focos y el reavivamiento de otros, lo que obligó a una nueva inspección de la reserva afectada por parte de funcionarios de la unidad especializada. Durante la intervención se constató nuevamente la combustión activa de formaciones vegetales.
Según la Ley n° 2715/05, el Banco San Miguel y la Bahía de Asunción fueron declarados Área Silvestre Protegida, con una extensión de 300 hectáreas. Los responsables de estos hechos podrían enfrentar sanciones de hasta cinco años de pena privativa de libertad o multa, conforme a lo establecido en el Código Penal y la Ley N.° 6779/21.