Ciudad del Este. Agencia Regional.

Un hombre que trabajaba como guardia de seguridad fue condenado a 15 años de prisión tras ser encontrado culpable por los hechos punibles de abuso sexual en niños, violación de la patria potestad y violencia familiar. Se trata de Gustavo Javier Martínez Duarte (30), quien vivió en pareja con una niña de 13 años que quedó embarazada, y además la tenía a golpes, según la denuncia.

La fiscal Emilce Ovelar de Rodríguez es quien dirigió la acusación en el juicio oral y público realizado en el Palacio de Justicia de Ciudad del Este (Alto Paraná). El Tribunal de Sentencia que dictó el fallo estaba integrado por los jueces Óscar Gabriel Genez, Lourdes Morínigo y Evangelina Villalba.

La causa tiene su antecedente en el año 2020, cuando el hoy condenado inició una relación prohibida con una niña de 13 años, quien resultó embarazada como consecuencia de los abusos sufridos. Al enterarse de la gravidez, el abusador se presentó a la casa de la víctima, conversó con su padre y le exigió llevar consigo a la menor, a fin de concretar una convivencia.

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El papá de la niña se negó a tal petición y, ante esta situación, la niña amenazó a su padre con acusarlo de abuso si continuaba oponiéndose a la relación. Finalmente, la menor abandonó su hogar y fue a vivir con el abusador. Durante ese tiempo, la víctima era mantenida encerrada y constantemente sometida a castigos físicos por parte de Gustavo Javier, a raíz de sus celos. Finalmente, el 3 de febrero de 2021, la joven regresó a la casa de sus padres con su hijo y relató los detalles del calvario que padeció conviviendo como pareja del adulto.

A pesar de los intentos del padre por convencerla a presentar una denuncia ante la Fiscalía, la menor se negó rotundamente, argumentando que no quería que el papá de su hijo terminara en prisión. De igual manera, el progenitor de la víctima presentó la denuncia a través del Servicio de Atención Telefónica 147, el cual remitió los antecedentes del caso al Ministerio Público, que inició la investigación.

Para ese entonces, la joven ya había regresado con el abusador y representantes de la Defensoría Pública y de la Fiscalía tuvieron que rescatarla. Fue ordenada una inspección de medicina forense y fueron constatadas varias lesiones en el cuerpo. El proceso llegó a la acusación formal y luego el juicio que determinó su culpabilidad para recibir una condena a 15 años de prisión.

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