Ciudad del Este. Agencia Regional.
La agente fiscal Emilce Ovelar solicitó la declaración de rebeldía de una mujer que habría raptado, golpeado y amenazado de muerte a una joven, motivada supuestamente por asuntos sentimentales de pareja. Se trata de Griselda Violeta García (25), quien está imputada por coacción grave y actualmente se encuentra prófuga de la justicia.
La agente fiscal explicó a La Nación/Nación Media que medicina forense confirmó que la víctima quedó lesionada en varias partes del cuerpo, incluso con cortes y que fue ella misma quien identificó a la autora principal. También mencionó que contarán con circuitos cerrados de grabación para tener más datos, y también testigos que pudieron haber visto la escena de la agresión.
Los hechos ocurrieron el pasado 31 de mayo a las 15:50 en la avenida Bernardino Caballero del barrio María Auxiliadora, de Presidente Franco. La víctima, Samira Araceli Fernández, caminaba con dirección al gimnasio cuando fue interceptada por un automóvil, de marca Toyota Premio. El conductor, quien llevaba tapabocas y gorro, descendió del vehículo y ordenó a la joven que subiera.
Sin embargo, ella se negó e intentó esquivarlo, pero en ese momento se sumó otra mujer y la obligaron a subir a la fuerza, supuestamente. Se trataba de la hoy imputada y declarada rebelde, pero también se encontraban otras dos mujeres en el auto.
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Dentro del vehículo fue vendada y amarrada, según la denuncia de Samira. Durante el trayecto, Griselda le reclamó que haya estado enviando mensajes a su expareja, que la descubrió y le exigía que se arrepintiera.
La presunta victimaria habría agarrado del cabello a la joven y le propinó un puñetazo en la cara, además de arañarle los brazos y las piernas, con la ayuda de las otras mujeres desconocidas, según dijo la fiscala y está en su acta de imputación. El maltrato siguió verbalmente, culpándola por iniciar una relación amorosa con su exconcubino.
ESTADO INCONSCIENTE
La llevaron a Samira hasta debajo de un puente en el kilómetro 11 Monday de Presidente Franco. Allí, las tres mujeres la arrojaron al suelo y supuestamente la golpearon, incluso arrojándole piedras. Samira quedó inconsciente y las responsables del hecho la abandonaron, huyendo del lugar junto al hombre que estaba al mando del vehículo.
Cuando recuperó la conciencia, Samira caminó por la zona hasta que encontró a una vecina que la ayudó y la llevó a su casa. Desde allí, se comunicó con su madre, quien la rescató y finalmente presentó la denuncia ante las autoridades.